Escribir sobre educación y vivir las palabras que se escriben

Miguel Ángel Pérez Reynoso*

Tengo presente que a partir de la década de los ochenta, poco se escribía sobre educación, como opiniones autorizadas y artículos de divulgación. El diario unomásuno que más adelante dio lugar al periódico La Jornada abrió sus páginas a Olac Fuentes Molinar, un agudo y destacado analista de la realidad nacional, el semanario Proceso dio cabida a otra pluma destacada en la autoría de Pablo Latapí Sarre, eran pocos los autores que combinaban la academia con la divulgación de sus ideas educativas. De manera intermitente se sumaron algunos personajes como: Manuel Pérez Rocha e Iván García Solís también daban a conocer su postura personal sobre todo vinculado con asuntos de coyuntura.
Años después surge (por iniciativa del propio Pablo Latapí junto con otros investigadores) el Observatorio Ciudadano de la Educación (OCE), que inicio con publicaciones mensuales o quincenales a modo de Comunicados en donde de manera monográfica abordaba asuntos de la vida educativa nacional y le planteaba de manera directa preguntas al gobierno en turno. Una diferencia es que dichos comunicados venían firmados por un equipo de redacción. Este proceso se fue haciendo más grande durante la década de los noventa y, en este nuevo siglo, plumas como las de Carlos Ornelas, Pedro Flores Crespo, Manuel Gil Antón, Luis Hernández Navarro y Roberto Rodríguez, fueron dándole un sentido de pluralidad y de riqueza a la producción de ideas pedagogas no especializadas pero si bien fundamentadas, que se hacían públicas en algunos diarios de circulación nacional o local. En la ciudad de Guadalajara el periódico El Occidental de la cadena OEM, los días martes publicaba a plana entera la postura de algunos personajes locales, dentro de los cuales me cuento desde el año de 1989 hasta 2004 aproximadamente, La sección se llamaba Educativa.
Hoy, como muchas cosas que pasan en este país las formas de difundir ideas educativas se han reconfigurado, han surgido algunos portales y revistas electrónicas con su respectivo espacio editorial y de opinión. El portal de Educ@rnos en Jalisco juega un papel importante debido a que, de manera constante, publica una o dos opiniones cada día, por autores fijos o permanentes. En otros lugares existen portales como Educación Futura que se ha tornado en un importante referente, de riqueza y pluralidad al darle cabida a todas las voces de las distintas expresiones y posturas de las personas o los actores sociales que tengan algo qué decir sobre educación. No tengo a la mano el recuento de autores pero todos los días aparecen nuevas colaboraciones, documentos y opiniones sobre la realidad educativa nacional e internacional.
En otros lugares existen otros proyectos editoriales, como Nuevas voces en educación, Insurgencia magisterial, Impulso informativo, Voces Magisteriales, Revista Odiseo, el periódico Milenio Diario tiene un suplemento semanal que aparece los días jueves llamado Campus Milenio con notas y opiniones igualmente interesantes y otros. Todos estos proyectos tienen de cierta manera abierta sus páginas, sirven para contribuir en la producción y circulación de ideas pedagógicas y en algunos casos mantener una postura clara con respecto a la realdad educativa que vive actualmente nuestro país.
Me parece que, pocas voces en el origen pasamos a tener un avance amplio de autoras y autores, esto podrá explicarse a modo de hipótesis desde tres perspectivas:

a) Que hemos mejorado nuestro nivel y el capital cultural en el abordaje de asuntos educativos.
b) Que algunos medios se han democratizado para dar cabida a nuevas voces, enriqueciendo la pluralidad en educación.
c) Que estamos ante una sociedad más plural y más informada.

De hecho ha habido encuentros o algunas iniciativas en donde se pretende reunir a los editores o responsables de dichos espacios editoriales u otras propuestas, como es el caso de Erick Juárez de Educación Futura que ofrece un taller con la finalidad de facilitar la redacción y publicación de escritos periodísticos en educación.
Me parece que estamos ante un escenario más rico de posturas y circulación de las ideas, de hecho comenzamos a tener miradas más especializadas de algunos rubros. La matriz o la regularidad es opinar en torno a la coyuntura del presente en la política pública y sus implicaciones educativas.
Tal vez haría falta hacer un ejercicio de sistematización de tantos esfuerzos en el camino, sistematizar significaría ordenar lo que tenemos hasta ahora y abrir nuevas vetas o nuevos nichos de publicación. El ser autor, lector o comentarista de la circulación de ideas educativas de la realidad nacional es un deleite. Aquí no hay verdades absolutas, no hay conclusiones contundentes, no hay netas acerca de este planeta llamado México. Sólo hay aproximaciones, modestas aristas que se acercan a conocer una realidad cada vez más compleja. Contribuciones diversas en la construcción de un debate colectivo que hacemos a muchas voces entre todos y todas y que está ahí, para que el lector o el siguiente autor vayan sacando sus propias conclusiones.

*Doctor en educación. Profesor–investigador de la UPN Guadalajara, Unidad 141. [email protected]