El fomento de la investigación en las Escuelas Normales. De los buenos deseos a las acciones aisladas

 en Miguel Ángel Pérez Reynoso

Miguel Ángel Pérez Reynoso*

En días pasados se llevó a cabo en Monterrey, Nuevo León, lo que fue la edición número 5 del llamado Congreso Nacional de Educación Normal. Ya Adriana Piedad García dio un adelanto de dicho evento. De nuestra entidad asistieron distintas personas de la cúpula dirigente y algunos académicos que hacen investigación.
A la investigación se le concibe en dos planos como una actividad complementaria de la docencia. Formar para la investigación no implica forzosamente formar para la docencia, ¿en dónde reside el interés de la racionalidad del grupo dirigente de las Escuelas Normales a nivel nacional, por preocuparse en el fomento de la investigación? Y la otra concepción tiene que ver con el hecho de generar conocimientos para que clarifique y reoriente el asunto de la formación para la docencia.
Con respecto a la realización de este tipo de eventos, existen tres hipótesis al respecto:

a) Ponerse al día de lo que hacen las IES y de esta manera achicar las brechas que separan a las Escuelas Normales del resto de las instituciones de educación superior.
b) Subirse a la ola de las modas académicas, hacer investigación en las instituciones de educación superior es una estrategia que garantiza prestigio, da visibilidad y garantiza el obtener fondos adicionales para el trabajo académico y el desarrollo institucional.
c) Las escuelas Normales (algunas de ellas, no todas) ya están preparadas para dar el gran salto académico y pueden ser o son capaces de fomentar la investigación desde su hacer institucional. Para ello contarán con recursos financieros, los recursos humanos se estarán moviendo para acercarse al fomento de la investigación y muy pronto la producción académica será de muy buena calidad.

Se puede tener una cuarta hipótesis que amalgame elementos de las tres hipótesis anteriores. Lo cierto es que la DEGESPE primero y ahora la DEGESU, han decidido hacer un evento anual pensado en recibir y darle cabida a infinidad de reportes de investigación de todo tipo. En ello es loable la tarea que implica llevar a cabo iniciativas y trabajos de investigación en su seno como los de este tipo.
Es obvio pensar que la investigación educativa no es una tarea sencilla, implica rigurosidad, seriedad, compromiso en el rigor académico. A cinco años de distancia, de la realización del primer congreso, las Escuelas Normales ya pudieran tener elementos para responder a preguntas tales como:

• ¿Qué tanto hemos avanzado en el conocimiento del proceso de formación, de las tendencias, orientaciones y perspectivas de dicho campo?
• ¿Qué tanto hemos profundizado acerca del conocimiento de las condiciones institucionales en donde se lleva a cabo la formación y cuáles son los cambios que deberán hacerse para mejorar dichas condiciones?
• ¿Qué tanto conocemos acerca del formador de formadores y del impacto de la práctica de éstos?
• ¿Qué tanto hemos avanzado en el conocimiento de los sujetos en formación, sus necesidades y las capacidades demostradas en el proceso de aprender para saber enseñar?

Y, por último, los congresos de investigación de las Escuelas Normales hasta dónde han servido para generar una agenda de conocimiento que sea atendida en la conformación de proyectos de investigación y pensados en responder a los cuestionamientos de dicha agenda.
Me parece importante este tipo de eventos, ya que en el fondo está pensado en inaugurar nuevas formas de concebir el trabajo educativo. A las escuelas Normales les toca ahora el sistematizar los avances, los logros, los aciertos en este tipo de espacios para poder tener claridad en los avances logrados y en las áreas que aún pueden pensarse como espacios abiertos a la oportunidad de la mejora.
Por último, es importante pensar en las 11 escuelas Normales públicas del estado de Jalisco, ¿cuál es su nivel de participación en este tipo de eventos? Con cuántas ponencias participan año con año y, lo más importante, hasta dónde ha avanzado el fomento de la investigación, que pudiera presumir de que ya tenemos claridad en lo que conocemos y en la agenda de todo aquello de lo que nos falta por conocer para cambiar y mejorar.

*Doctor en educación. Profesor–investigador de la UPN Guadalajara, Unidad 141. safimel04@gmail.com

Comentarios
  • Rafael Bernardo

    Puro sueño guajiro, Migue. A cuentagotas, es rescatable el trabajo investiga tuvo en la educación Normal. Falta mucho por andar y hay poca visión de las autoridades estatales.

Escriba su búsqueda y presione ENTER para buscar