Uno elige lo que es
Verónica Vázquez Escalante*
Todos los seres que tenemos el regalo de la vida ya somos afortunados. Si le agregamos salud física y mental pues ya es un doble agradecimiento (a Dios o a la Naturaleza, como usted quiera). Más aun, nosotros, como seres humanos tenemos el dominio y la voluntad de manejar nuestro libre albedrío y también usted lector, elige si es Filosofía o Ciencia. Lo interesante es que podemos ser de acuerdo a nuestros niveles de salud en todos los aspectos, quiénes elijamos nuestro camino; podemos optar quién ser, cómo ser, qué hacer, cómo reaccionamos ante determinadas situaciones y dentro de nuestra libertad de elegir, resulta paradójicamente, que estamos cautivos en la esencia humana. ¿Por qué me enojo, o me asusto? ¿Por qué me da gusto, dolor o tristeza? ¿Por qué tengo miedo o miedos? Las sensaciones van implícitas en la aventura de la vida, en el ser y estar; por la educación que almacenamos a lo largo del camino que determina las emociones.
El ser humano acumula tal información en su mente, que frecuentemente ni cuenta se da de lo que sabe o ignora. El ladrón ha elegido ser así, el que trafica con todo lo prohibido, también ha escogido andar esas brechas y pueden citarse miles de casos que todos hemos escuchado. Los factores que suceden sin la intervención del sujeto (estatura, color de piel, rasgos físicos o incluyendo situaciones no deseadas como accidentes o fenómenos naturales o sociales) tendrán, irremediablemente influencia en determinar lo que es y hace el sujeto sólo que vuelve a intervenir la voluntad o libre albedrío. Lo que para mí puede ser un gran problema, para usted puede ser algo que fácilmente se resuelve y así es como se dan las distintas personalidades, caracteres y temple de cada uno.
El escenario que se contempla en el campo de la educación actual (en México) tiene mucho que ver con esas voluntades. Todos podemos elegir qué leer o no leer, qué hablar o qué evitar, si cuido o no la ortografía, si dependo de redes sociales o no, por mencionar algunos ejemplos. Lo institucionalizado no se cambia (planes y programas), de alguna manera hay que cuidar los cánones tanto como se pueda por la formación que se debe tener para insertarse a un campo laboral a determinada edad. También la geografía humana nos llevan a comprender que en el mundo globalizado (que nos ha tocado vivir), es parte de las nuevas generaciones y nos guste o no, ahora todo el globo terráqueo depende más de las interacciones entre naciones que lleva a nuevos conocimientos y aprendizajes; ojalá se evite perder identidad, mejor fortalecer aquellas características positivas que han distinguido a nuestro México, seguro tenemos más buenas que malas.
*Doctora en Ciencias de la Educación. Profesora de la Universidad Pedagógica Nacional, Unidad 145 Zapopan. veve30@hotmail.com