Saberes vigentes, saberes perdidos
Jaime Navarro Saras*
Hace unos días me enteré del fallecimiento de un panadero (de quien no supe su nombre porque quizás lo vi unas cuantas veces cuando él llegaba a entregar los canastos y sacos con birotes mientras hacíamos fila unos clientes impacientes para comprarlos). Los birotes los vendían en un local del mercado municipal de la colonia del Fresno en la ciudad de Guadalajara y desde su fallecimiento no los hay más.
Pregunté si iban a volver a llevarlos y me dijeron que no, que la receta y la técnica para hacerlos solo era de él y que a nadie le enseñó a hacerlos, muy triste esa pérdida para su familia y lo que representó el ser humano que dejó esta vida, también estamos tristes por esa pérdida quienes tuvimos la oportunidad de paladear los sabrosos birotes que hacía solo los fines de semana, gracias por esa oportunidad.
Seguramente experiencias como ésta se repiten día a día, no solo cuando se pierden recetas, sino también historias, estrategias, fórmulas, prácticas, lenguas, valores y diferentes cosas que las personas aprenden y no tiene la oportunidad de compartirlo con otros por múltiples razones.
En lo referente a la educación y a la aportación de los maestros sucede algo parecido, sus saberes y experiencias han sido desdeñados por esta reforma educativa y el Modelo que la sostiene. Sus prácticas educativas aprendidas en las aulas y desarrolladas durante sus años de experiencia se perderán para siempre, nadie les ha ayudado a recuperarlas y menos aún a ponerlas a disposición de aquellos docentes que recién ingresan al servicio.
Si algo caracteriza a los maestros es que son expertos en desarrollar estrategias didácticas para salir del paso cuando se presentan dificultades en las aulas, son hábiles en la invención de mediaciones para dinamizar su trabajo, saben experimentar con sus alumnos y las aulas son su campo de batalla, quizá lo que podemos reclamarles es que les cuesta trabajo sistematizar y recuperar cada acción que hacen bien, pero es una práctica que se puede aprender y, desde allí, el siguiente paso tiene que ver con escribir y compartir esos saberes con sus iguales y con los interesados en la educación para poder desarrollar literatura pedagógica que pueda ser debatida en foros y compartida con los protagonistas directos que aporten elementos para mejorar de la realidad educativa.
A esta reforma educativa se le pasaron muchas cosas, quizá la más importante haber olvidado y explotado los saberes de los maestros. Una Secretaría de Educación que es capaz de gastar millones de pesos en campañas publicitarias que poco le aportan a los procesos áulicos y que ignora los saberes de los docentes acerca del trabajo docente no es otra cosa que tiempo perdido y un mensaje por demás directo: su interés es por las formas y no por el contenido de lo que es una verdadera reforma educativa.
Ignorar a los maestros es renunciar a la esencia misma de la educación, sus saberes son por demás importantes, al dejar pasar la esta oportunidad a la larga será lamentable para las futuras generaciones, es obvio que los maestros no están invitados como protagonistas a este Modelo en decadencia y, entre otras cosas, no tuvieron la fortuna de probar la exquisitez de los birotes de la Colonia del Fresno como lo tuvimos otros y que esos saberes no volverán, como tampoco serán utilizados los saberes de los maestros que hoy pueblan las aulas.
*Editor de la Revista Educ@rnos. jaimenavs@hotmail.com
A menos que la dispendiosa campaña publicitaria no sea más que actos anticipados del candidioto Ñuño. Y aunque Sigue estando ausente el perfil de la oposición de MC respecto al tema educativo. Tanto silencio hace sospechar que ya se negoció el 18. Así los únicos birotes que regresarán sería del PAN
Estimado Manolo, lo que se ve difícilmente se puede ocultar con discursos y comerciales vacíos de ideas y propuestas que realmente contribuyan a hacer real una reforma que solo es de lengua.
Jaime, tienes razón. Es una torpeza innovar partiendo de la nada. La tal reforma educativa así procede. En nuestra Revista Educarnos muchas limitantes le han señalado a los despropósitos de la SEP. Tú contribuyes mostrando otros. No valoran la realidad de las prácticas educativas vigentes; simplemente la desdeñan. Además, no alientan la producción escrita de nuestro gremio. Lo valioso de sistematizar nuestras experiencias educativas estriba en dejar constancia de sus aciertos y limitaciones. Lo que profesores investigadores han sistematizado sobre nuestra realidad educativa lo ignoran los funcionarios, supuestamente doctos, que ensalzan sus sueños de opio.
Que te puedo decir Luis, creo que solo quienes hemos vivido en las aulas podemos entender el valor de la experiencia y su contribución a la educación.
De acuerdo con Jaime: Los saberes y haceres de los maestros no son tomados en cuenta, según me parece, antes y ahora. Y me vienen a a memoria fácil una vientena de personas, profes y no, que sí han buscado preservar esos saberes y haceres prácticos y tácitos de muchos maestros. Tampoco se les hace caso, antes y ahora. Tampoco se acepta ofrecerle tiempo de estudio y de escritura a los profes que tienen algún “bolillo” entres sus recetas. Antes y ahora. Desde antes y ahora con gran gusto contribuyo a cualquier acción que desde fuera del sistema haga caso a esos maestros y encontrar el modo de preservar y aprovechar el fondo de esos conocimientos, compartiendo con los neo profesores.
Si Miguel, es algo en lo que siempre hemos insistido y tu aportación ha sido vital para entender el tema de la recuperación y significación de las prácticas y su valor real, es una lástima que no se quiera valorar toda esa experiencia de los maestros para mejorar la educación.
Si, de acuerdisimo con los comentarios, últimamente estoy experimentando la pérdida de varios de mis colegas en el área educativa, debido a las jubilaciones masivas que se han venido generando a causa de la mentada reforma educativa, los maestros se sienten agobiados por las exigencias y los pocos o nulos apoyos que se tienen, y eso los lleva tomar este tipo de decisiones, les he comentado que es como si una perla que se tenía a la mano, ahora se va hasta el fondo del océano, lo cual es lamentable debido a que se pierden todos sus conocimientos y experiencia en el medio educativo.
APENAS UN GRUPO DE MAESTROS SE REUNÍA PARA PRESENTAR SUS EXPERIENCIA SUS MODOS DE DAR LA CLASE, SUS SOLUCIONES A PROBEMAS CONCRETOS, INMEDIATAMEWNTE LAS AUTOIDADES DE LA SEP MANIPULABAN LAS REUNIONES LAS BOICOTEABAN LAS VIGILABAN TEMIENDO QUE ESOS MAESTROS SE SALIERAN CON LA SUYA. SE VOLVÍA ENTONCES A LAS EUNIONES OFICIALES DE “SIEMPRE LO MSMO”, Y LOS MAESTROS SE VOVÍAN, SE VOLVIERON INDIFERENTES, “CUMPLIDORES DE LOS TIEMPOS”. ESO PASABA Y CREO QUE SIGUE PASANDO.
PROFR. JUAN GUERRERO JAIME