Pl@nt Net: lo que las plantas nos enseñan

Alma Dzib Goodin*

Existe una distancia relativa entre las plantas y la especie humana. Las plantas están en espacios destinados ya sea de manera natural o artificial para ellas, y muchos las perciben como ornamentos para el paisaje, o los espacios habitables. A veces damos por hecho su existencia, pero son muy valiosas para el ecosistema.
Desde otra perspectiva, las plantas tienen mucho que enseñarnos sobre nosotros mismos, y la idea peligrosa de esta semana, es que nos dicen mucho de cómo aprendemos.
¡No, aún no me vuelvo loca!, pero espero no se moleste con la siguiente noción: todas las especies sobre la faz de la tierra tienen como principio común adaptarse para sobrevivir. El aprendizaje tiene un papel importante en dicho proceso, y a diferencia de la especie humana, o los mamíferos que tienen una esperanza de vida relativamente larga; las plantas se adaptan a ritmos mucho más rápidos. Quizá solo algunos pocos árboles tienen una esperanza de vida de más de 100 años, y por supuesto, tienen mucho que decirnos.
De ahí la importancia de una aplicación llamada Pl@nt Net, que se puede descargar de manera gratuita y que tiene dos objetivos: el primero, quizá el más interesante para el público en general, es que permite identificar especies. No sé ustedes pero durante mucho tiempo me han interesado las plantas, pero no soy experta en botánica, así que tomar fotos de ellas se puede volver inútil sino se es parte de un grupo conocedor. Pl@nt Net en ese sentido permite identificar especies, al mismo tiempo que las fotos que tomamos, se convierten en parte de una gran base de datos que identifica la época del año en que la planta fue reconocida, el lugar, y la especie de la cual se trata.
Ahora bien, ¿cómo se relaciona esto con el aprendizaje?, el paso de la muerte es comprender que para lograr su adaptación las plantas requieren procesos flexibles. Ya no es solo la forma natural en que las plantas se reproducen por medio de la polinización, fase que las plantas menos ornamentales aún llevan a cabo, sino la migración de las mismas.
Aquí va la explicación: las plantas silvestres han diseñado procesos a lo largo de su desarrollo para reproducirse, algunas a través de semillas con sistemas altamente innovadores para que sus semillas viajen empujadas por el viento, o bien a cargo de otras especies, como los pájaros, las abejas o las mariposas, que transportan esporas, semillas o polen a otros espacios, en los cuales las plantas se adaptan.
Si somos observadores, a veces los perros y gatos se convierten en transportes perfectos, pues las semillas se pegan en sus pelajes, éstos viajan distancias grandes o pequeños, y permiten que las plantas migren de un lugar a otro.
A veces las migraciones son conscientes, como cuando transportamos una planta de una casa a otra o de un país a otro, pero a veces migran sin darnos cuenta. Una vez que las plantas llegan a otro lugar, tendrán que adaptarse a él para sobrevivir.
Uno de los ejemplos más interesantes para mí, es el caso del diente de león, que es una planta que se ha diversificado en distintas subespecies, pero que se encuentra en gran parte del planeta. Su caso es encantador, porque cualquiera que tenga un patio la ha arrancado, aplicado químicos, regado con agua caliente, y sin embargo, la planta abre su paso para subsistir, cada vez más fuerte por su curiosa capacidad de adaptación y resiliencia. ¿Cómo lo logra?
No va a la escuela, eso es seguro, pero es suficientemente flexible para crear sistemas eficientes para que sus semillas viajen con el viento lo más lejos posible, y han desarrollado un proceso que permite que las semillas se esparzan aún cuando la planta ha sido arrancada de raíz.
Si se anima a observar a su alrededor, encontrará otros ejemplos de plantas silvestres que dan muestra de adaptación en el ambiente, que nos pueden enseñar mucho de cómo la vida se crea mecanismos innovadores para continuar, y se dará cuenta que algunas de ellas cambian de color, tamaño o forma para adaptarse a sus nuevos ambientes, y algunas de modo tan violento, que de hecho aniquilan a otras plantas.
Si desea participar en este encuentro científico con las plantas, solo descargue la aplicación, es gratis, permita el acceso a su cámara y comience a participar en la construcción de un mapa verde a nivel mundial, al mismo tiempo que disfruta de tomar fotografías. Me parece que los niños aprenderán mucho de esta experiencia.

*Directora del Learning & Neuro-Development Research Center, USA. alma@almadzib.com