La vigencia del pensamiento de Paulo Freire a 103 años de su natalicio

Miguel Ángel Pérez Reynoso*

El 19 de septiembre de 1921 nació en la ciudad de Recife, en Brasil, Paulo Freire, uno de los pedagogos más representativos y emblemáticos de la llamada pedagogía latinoamericana. Paulo Freire, también se tornó en bandera (sobre todo en Brasil) la defensa de la educación popular y de la llamada educación crítica y emancipadora. Él dirigió sus trabajos y estuvo a favor de una educación para los desplazados, los desarrapados, los más pobres.
Existen incluso en algunos países, institutos, seminarios y cátedras que se han especializado en el rescate del pensamiento y de las contribuciones de Paulo Freire. Las contribuciones de Paulo Freire son de tres tipos: teóricas, metodológicas y propiamente educativas.
Las contribuciones teóricas de Paulo Freire rompen con las concepciones tradicionales del acto educativo y de la definición de la relación educativa, a partir de pensar de otra manera la relación educador-educando, del espacio en donde se educa, donde se rompe con la concepción del aula de clases, al pensarlo como un recinto cerrado y, ahí mismo, se concibe a la comunidad y al contexto como entes educadores.
Las contribuciones metodológicas de Paulo Freire rompen con la concepción tradicional de investigar en educación, al concebir a la investigación como un intercambio de saberes. Paulo Freire rescata los saberes populares y los saberes empíricos de los pueblos y las comunidades, les da un valor importante y obliga que los investigadores respeten dichos saberes y caminen en torno a ello.
Las contribuciones educativas de Pablo Freire, que es la parte más valiosa de su trabajo, tienen que ver con aportar en la construcción de nuevas finalidades educativas, pensadas todas ellas en lograr una educación para la emancipación y una educación para la esperanza. Sin embargo, a Paulo Freire se le ha reducido o distorsionado en algunos círculos magisteriales. Mucha gente lo cita sin haberlo leído y mucha más gente lo reivindica sin conocerlo puntualmente. Algunos personajes reivindican la figura de Paulo Freire sin conocer realmente la profundidad de su pensamiento y la vigencia actual de sus aportaciones pedagógicas.
Es importante reconocer la vigencia de Paulo Freire, como una alternativa pedagógica en los rubros que antes se decían en lo teórico, en lo metodológico y en lo pedagógico pero, no verlos a todos ellos, desde una forma dogmática de proceder como algunos lo han hecho; sino como una alternativa más que debe de ser corregida, clarificada y adaptada a las condiciones reales de cada comunidad por eso Paulo Freire, es un educador latinoamericano porque tiene vigencia en cada rincón de nuestro continente, desde el norte en nuestro país hasta el sur en la parte austral donde se unen los países de Chile y de Argentina pasando por los 10 países del sur del continente, los siete países de centroamérica y los países insulares que están en el Caribe.
La mejor forma de recordar a Paulo Freire es buscando la congruencia y practicar una pedagogía que esté a servicio de los pueblos por su verdadera liberación.

*Doctor en educación. Profesor–investigador de la UPN Guadalajara, Unidad 141. [email protected]