De Carrusel y cenizas

Rubén Zatarain Mendoza*

La celebración de un aniversario más de la fundación de la ciudad de Guadalajara se ha suscitado en un marco de estridentismo en el Centro Histórico de la ciudad en donde un polémico carrusel ha captado la atención de la prensa nacional y local, de los propios tapatíos y viandantes.
La prensa ha cuestionado el costo de esta atracción que ha utilizado el gobierno del ayuntamiento con el falaz argumento de que apoya la derrama económica al captar visitantes.
“Pablo Lemus alcalde de Guadalajara, Jalisco, pagó 26 millones de pesos por un carrusel traído de Francia para celebrar el 481 aniversario de la fundación de la capital de Jalisco, informó el periodista Carlos Loret de Mola en su noticiero nocturno de Latinus” (17/02 /23).
“Atracciones millonarias para celebrar a Guadalajara no son nuevas. Desde marionetas gigantes, conciertos masivos y las ediciones anteriores de Gdluz han costado varios millones de pesos” (Karla Victoria Rodríguez, Milenio 15/02/ 23).
“Tras las críticas por el elevado costo del carrusel traído de Francia el alcalde de Guadalajara Pablo Lemus pide a sus colaboradores mantenerlo abierto todo el día y llevar estudiantes de muchas escuelas a diario, manden videos de las filas para ingresar, que se muestre feliz a la gente de utilizarlo según revelan unas capturas de pantalla de WhatsApp compartidas a este medio” (Proceso Jalisco 16/02/ 23).
“La empresa argentina Felimana Luna Park confirmó a La Jornada que un carrusel similar al que compró el ayuntamiento de Guadalajara en 25 millones 985 mil pesos (un millón 367 mil dólares) a un intermediario local, que a su vez lo importó de Francia, ellos lo venden en 390 mil dólares, es decir 250 por ciento más barato”. Proceso, Jalisco 21 /02/ 23
La celebración se ha desarrollado en un marco caracterizado por la alta incidencia delictiva en homicidio doloso en la ciudad según información de la SEDENA y una tremenda ineficacia en la recolección de basura.
Colonias icónicas alrededor del centro histórico han celebrado el aniversario entre pilas de bolsas de basura en las esquinas.
Los reflectores políticos sólo iluminan las plazas, instituciones públicas y el edificio principal del gobierno municipal mientras en la oscuridad de aire contaminado de las calles, la campanilla de recolección ha de sonar hasta por una semana.
Vaya dificultades para formar en el eje articulador de Vida Saludable a los Niños, Niñas y Adolescentes del municipio.
Hacer carrera política tiene ahora la particularidad de montarse en los eventos de carácter histórico, como la fundación misma de la ciudad, tienen la particularidad también de exhibir, licitar carruseles mareadores y juego de luces que encandilan.
El carrusel como analogía misma de la diversión infantil, montar modelos de animales, las añejas remembranzas de los ojos de padres y madres que evocan en este dispositivo de ferias el tiempo lejano de sus propias biografías, los transeúntes indiferentes que miran de soslayo y quieren las plazas libres.
El centro y sus plazas, lugares privilegiados donde concurren históricos proyectos de gasto presupuestal de carácter estético y recreativo en detrimento de la atención de necesidades primarias en las colonias y sectores que reproducen la vida citadina con modelitos de vida e inequidades coloniales o porfiristas.
Hoy es miércoles de ceniza y de este ejercicio de carácter religioso colectivo hay un sentido metafórico de carácter laico donde se han lanzado a la a la pira las promesas de llegada y en las vueltas del carrusel se cifran las expectativas y ambiciones de las precampañas discrecionales que vienen en la transición de gobierno en prospectiva.
Divertir a la gente es también una manera anticipada de hacer campaña política y de gastar, de legitimación ante los gobernados, o al menos ese es el sentir de los operadores de este tipo de eventos que se apropian de las calles y manzanas del centro histórico para convertirlo en escenario todo.
Las cenizas, más allá de su finalidad de carácter religioso, representan la metáfora del polvo al viento de las esperanzas del ciudadano de tener un mejor gobierno que cumpla con la agenda de desarrollo social humano, económico, educativo, cultural, artístico, ambiental turístico y de humanización del espacio urbano y de los servicios que la ciudadanía demanda.
En está temporada la ciudad regala cíclicamente las flores bellas de primaveras y jacarandas, pero no regala tan fácilmente buenos gobiernos, independientemente de los falsos colores de los onerosos partidos políticos
Celebrar la ciudad no tendría que ser solamente sumar un año más.
Tendría que ser la oportunidad de evaluar el índice de desarrollo humano y la capacidad de sus gobernantes de atender aspectos esenciales como la seguridad, su educación y servicios básicos como agua y calidad de aire.
El carrusel, juego infantil y metáfora del tiempo que se sigue agotando y no volverá, la vuelta mareadora a los problemas no resueltos que siguen dando vueltas inexorablemente; el carrusel que de manera circular tendría que poner en foco la mirada ciudadana y someter a sus gobernantes a rendición de cuentas y ejercicio de gobierno más comprometido con las causas sociales.
Los días de celebración de un aniversario más están quedando atrás y el carrusel de los personajes y las propuestas políticas ya está dando vueltas para el ejercicio de transición venidero y la recomposición de proyectos.
En un futuro inmediato habrá tiempos de descuido de la administración pública y de la gobernanza mínima.
De mano del espíritu de celebración el lenguaje implícito de la lucha por el poder y el espacio de gobierno.
Desde la capital del estado los tiempos y los movimientos que vienen para la entidad federativa, el país y el propio municipio.
La prensa local de periódicos como El Informador convertido en vocero de Comunicación Social del gobierno municipal, el siempre frágil derecho a la información y las prácticas fenicias de vender la pluma y la imprenta. El cuestionamiento de un área de la prensa convertida en oportunidad de mercado de otra área de prensa que tiene precio.
Generar tendencia y tergiversar la mirada crítica de la ciudadanía siempre influenciable por la tinta de los periódicos, por las campañas en medios digitales y por la falsa elocuencia de los oradores tras el micrófono, que venden arte y cultura como mediaciones de reconocimiento ciudadano.
Los movimientos que vienen en los equipos de la administración pública para satisfacer la tierra pedregosa de las ambiciones políticas.
El carrusel de hombres y mujeres, el posicionamiento interno en los partidos, los felices y los resentidos, la opción del mandato ciudadano siempre como moneda de cambio al aire.
Un aniversario más de la ciudad de Guadalajara convertido en cenizas, no sabemos cuánto de lo puesto en escenario será venda o capital redituable en preferencias electorales y candidaturas.
Guadalajara la vieja ciudad, con influenza crónica, el municipio afrancesado, el carrusel, el Gdl luz-oscuridad; Jalisco,el estado libre y soberano casi bicentenario, tiempos de movimientos políticos, tiempos refundacionales, tiempo de gestar y dar a luz los protagonistas y las voces que vienen.

*Doctor en educación. Profesor normalista de educación básica. zatarainr@hotmail.com