Las inteligencias múltiples en el aula
Mario Ramos Carmona*
Ahora que las habilidades del pensamiento vuelven a ocupar los espacios centrales del discurso educativo oficial, por la publicidad de aprender a pensar por encima del aprendizaje memorístico, que en el imaginario oficial y mediático es el único aprendizaje real en las escuelas, llega a mi memoria, la teoría del Howard Gardner “La teoría de las inteligencias múltiples”.
Gardner desarrolla la teoría de las inteligencia múltiples, partiendo de la idea de que el sujeto puede tener diferentes habilidades o talentos para resolver problemas específicos, él se pregunta cuáles son las habilidades que debe de tener un joven para aprenderse de memoria el “Corán” completo y acceder a estudios religioso en su comunidad o las que debe de desarrollar un marinero diestro de las islas de Oceanía con la orientación de las estrellas, llegar de una isla a otra, sin haber hecho estudios de cartografía o de navegación en ninguna escuela.
Él cuestiona los test psicométricos que intentan medir el coeficiente intelectual de las personas, porque muchos aspectos de las personas no son medibles y las pruebas que son estandarizadas no pueden ser correctas, por ser generalizables en su aplicación.
Howard Gardner señala en “Las estructuras de la mente” –Me parece que una competencia intelectual humana debe dominar un conjunto de habilidades para la solución de problemas, permitiendo al individuo resolver los problemas genuinos o las dificultades que encuentre y, cuando sea apropiado, crear un producto efectivo y también debe dominar la potencia para encontrar o crear problemas estableciendo con ello las bases para la adquisición de nuevo conocimiento.
Clasifica las múltiples inteligencias en: inteligencia lingüística, lógico matemática, espacial, corporal kinésica, musical, interpersonal e intrapersonal. Cada una de estas inteligencias supone una serie de capacidades y los talentos que se manifiestan en la vida cotidiana. En las últimas publicaciones Gardner habla de una inteligencia espiritual o trascendental.
Thomas Armstrong (1999) en “Las inteligencias múltiples en el aula” afirma que cada persona posee las siete inteligencias y que la mayoría de la gente puede desarrollar cada inteligencia hasta cierto nivel; dice también que las múltiples inteligencias trabajan en conjunto de forma compleja y que hay muchas maneras de ser inteligente dentro de cada categoría.
EL aporte de Gardner a la comprensión de la inteligencia y al desarrolla de éstas en la escuela es indudable y Armstrong desarrolla una propuesta práctica para su desarrollo en el aula, dando pistas y sugerencias de como descubrir y estimular con actividades prácticas las múltiples inteligencias en el aula.
Sin duda, son aportes teóricos prácticos formidables para trabajar en el salón de clases, solo que hay que sistematizar las experiencias, desde el diseño hasta la recuperación de la experiencia, de esa manera esta y otras propuestas educativas pueden ser importantes.
A propósito del nuevo modelo y el discurso educativo oficial, éstas y otras teorías sobre las habilidades del pensamiento pueden ponerse en juego, aunque pareciera que ya han pasado los años desde la publicación de estos textos.
*Doctor en educación. Investigador independiente. [email protected]