Golpes no, lucha de ideas si

Rubén Zatarain Mendoza*

En la construcción de la convivencia social, la omnipresencia de lo político es una realidad. Permea en las mentalidades colectivas una forma de hacer ciudadanía, una adscripción moldeada familiar, escolar y por instituciones como los partidos políticos, los sindicatos, la Iglesia y los medios de comunicación.
Sutilmente algunos mensajes. Constantes algunas prácticas, van condicionando comportamientos colectivos, generan las huestes sociales necesarias en la lucha por el poder. La democracia es cosechar respaldo de mayorías.
La ética de la política y los políticos sin ética, la visión sociológica didáctica weberiana espera paciente, casi en el olvido: “El político debe tener: amor apasionado por su causa; ética de su responsabilidad; mesura en sus actuaciones”.
La división política de los Estados Unidos Mexicanos es más que las 32 entidades federativas; hay historias, experiencias de gobiernos, militancias aglutinadas en partidos políticos, hay esperanzas y desencantos, hay deseos de confrontar y medir fuerzas, hay prácticas de gobierno narcisistas, egocéntricas, recaudadores “Ser ejemplo a nivel nacional” como falso ideal.
La movilización ciudadana se ha manifestado en las calles, Noviembre ha sido un mes de por lo menos cuatro marchas significativas donde emerge la dimensión emocional y el sentir a través de la expresión oral y escrita en consignas y pancartas en el espacio citadino del centro histórico, la plaza de la Liberación, el Zócalo, el Ángel de la Independencia de la Cd Mx y en los alrededores de la Expo Guadalajara.
El 14 de noviembre la marcha de los opositores al proyecto de reforma electoral presidencial y morenista. La participación de actores polémicos como Elba Esther Gordillo Morales, Vicente Fox, José Woldenberg, Margarita Zavala, Santiago Creel, entre otros.
Miércoles 23 de noviembre, la marcha de estudiantes y trabajadores académicos de la UdeG del edificio de la Rectoría General a la Plaza Liberación en Guadalajara; la autonomía universitaria y el presupuesto como consignas, la revocación de mandato contra el gobernador Alfaro como agregado, “persona non grata”.
Sábado 26 de noviembre, cerca de 3000 personas adscritas al partido político de Movimiento Ciudadano y a distintas dependencias de la administración del actual poder ejecutivo en Jalisco se manifestaron en el momento inaugural de la 36ª edición de la Feria Internacional del Libro en contra de la Universidad de Guadalajara. Una surrealista forma de hacer educación y promover la lectura.
Domingo 27 de noviembre, 1. 2 millones de personas se concentraron en el Zócalo de la Cd Mx para expresar respaldo a la reforma electoral propuesta por el poder ejecutivo del país y a favor de la reforma del INE.
Golpear con guante blanco, el juego de vencidas de los liderazgos y los intereses políticos adyacentes a las masas que caminan y se manifiestan, “tomar las calles” como mensaje al otro, al adversario que amenaza mi territorio, mi bastión político, la causa, la bandera; mi discurso y las razones que justifican en el terreno y las miserias del poder, como escribe Michel Foucault: “El discurso no es simplemente aquello que traduce las luchas o los sistemas de dominación, sino aquello por lo que, y por medio de lo cual se lucha, aquel poder del que quiere uno adueñarse”.
A ras de suelo la expresión popular presuntamente legítima a una causa, la arenga del líder o los líderes que encabezan las columnas de gente, el paso del marchante, las cámaras fotográficas activas, los periodistas en balcones y aceras.
El ejercicio del derecho a manifestación, las fuerzas invisibles de algunas manos orquestadoras, las voces altisonantes de hombres y mujeres que buscan ofender, desacreditar en un proceso de gestión del odio colectivo cuyo objetivo es el adversario.
Golpes no, pensar y participar si.
La capacidad de organizar la masa humana, las pasiones comunes y las causas, los empleados y la pobreza como objeto de causa, por el número de votantes que representa.
Los riquillos y porros que a buen resguardo acicatean a sus huestes mientras resguardan intereses en la atmósfera tranquila al cuidado de guardaespaldas y propaganda comprada.
Los nombres de los adversarios, el enemigo a vencer en la guerra de las cifras de los participantes voluntarios o acarreados. Por un lado se conmina contra Lopez Obrador y su reforma electoral “el Ine no se toca” como consigna; por otro lado miles de voces corean contra Lorenzo Córdoba y el INE, a favor de la Cuarta Transformación, contra la corrupción.
La marcha de la Universidad de Guadalajara dirige baterías y arengas contra el gobernador Entique Alfaro por atentar contra la autonomía universitaria y el presupuesto.
Por otro lado, un menor número de voces corean débiles consignas en el marco de la inauguración de la 36ª edición de la Feria Internacional del Libro. Contra Raúl Padilla López y el rector Ricardo Villanueva; por su control de la casa de estudios y usar el presupuesto público en manifestaciones, por ostentar cacicazgo.
Días de pelear, días de subirse al ring, de usar la palabra y el Twitter como violencia simbólica, días de medir fuerzas y ensayar marchas, estrategia de defensa, ganchos al hígado y fintas ante micrófonos y cámaras.
Coyuntura de autorización de presupuestos, de luchas veladas y explícitas en temas como la reforma electoral y “el Ine no se toca”, días de Recrea Academy y FIL con presencia de Lorenzo Córdoba en el escenario de la expo Guadalajara, días de hacer política emocional en las calles, en foros y en escenarios a modo.
Fin de semana 26 y 27 de noviembre de camiones repletos de profesores en el Hemiciclo a Juárez y la Alameda, en el Ángel de la Independencia y en el Zócalo, días también de profesores dentro de la expo Guadalajara y profes, amorosos espontáneos de emecismo en el parque de las Estrellas y la avenida Mariano Otero en Guadalajara detrás de mascarillas y bajo sombreros y cachuchas al lado de funcionarios de la Secretaría de Educación Jalisco.
Surrealismo incomprensible, táctica y estrategia improvisada, la fuerza del libro que se impone a las piras nazis, la fuerza de la cultura en los días grises del otoño maduro.
Mañanas de participación ciudadana sectaria y de molestias para los automovilistas atrapados en calles y avenidas, de impacto en la productividad; la lucha de contrarios, las visiones distintas sobre la agenda nacional y la agenda estatal empantanada en el tema de la Universidad de Guadalajara.
Los recursos públicos y su destino para 2023, el movimiento de ajedrez en el tablero político, la antesala de los procesos de sucesión presidencial y de gobernador.
El arte visceral de hacer política y acotar el espacio de acuerdo y diálogo para la resolución de problemas, sumar manifestaciones como criterio de músculo para aminorar la fuerza del adversario, la expansión de la brecha entre los actores, el pacto social de una gobernanza nueva a nivel de emociones ingobernables de quienes toman decisiones.
El arte de golpear sin dejar sangre, la intención de eliminar, la política maquiavélica de la fuerza e insensibilidad del Príncipe “A los hombres se les ha de mimar o aplastar, pues se vengan de las ofensas ligeras, ya que de las graves no pueden: la afrenta que se hace a un hombre debe ser tal que no haya ocasión de temer su venganza”.
La ciencia política, los logos y las razones en cuerda de papalote, la masa crítica, la cortina de humo en mensajes retóricos y descalificadores; los rosados, los tintos y los naranjas en un paisaje de convivencia social amenazada.
Los fifis marchan, los chairos marchan, una gran parte de la sociedad futbolera, masa activa de misas y parroquias, contempla.
Los universitarios y académicos marchan, los trabajadores de las administraciones estatal y municipales marchan, los diputados del Congreso de Jalisco marchan, tal vez porque como decía Emil Cioran: “Nuestros rencores derivan del hecho que, permaneciendo por debajo de nosotros mismos, no hemos sido capaces de alcanzar la meta. Esto nunca se lo perdonamos a los demás”.

*Doctor en educación. Profesor normalista de educación básica. [email protected]