Finalmente tendremos secretario de educación en Jalisco

Jaime Navarro Saras*

Después de tanto especular sobre quien sería elegido como nuevo secretario de educación en Jalisco para los próximos seis años, al fin tenemos al que se hará responsable de los destinos educativos del estado, primero se dijo que éste sería de la Universidad de Guadalajara, después que del SNTE, al final se optó por alguien ajeno (de acuerdo a su origen académico y currículum laboral) a estos grupos de poder. Juan Carlos Flores Miramontes resultó el ganador de la rifa del tigre, a decir de sus datos biográficos publicados en las redes sociales, en la actualidad funge como Director de la carrera de ingeniería mecatrónica en la Universidad Panamericana (UP), antes fue Director General de Educación Superior de las universidades tecnológicas de la SEJ, también Director general del Colegio Altamira, egresado de la carrera de pedagogía de la UP y director general de la Asociación de directores escolares en México (ADEM), un perfil de tecnócrata, allegado a la educación privada y experto en las nuevas tecnologías.
Las otras dos posiciones importantes en la SEJ, las de la gobernanza del magisterio, recaen, tanto en Baldemar Abril Enríquez (principal operador a los inicios de la Universidad Santander en Jalisco y director de educación en el Ayuntamiento de Guadalajara con Enrique Alfaro) como Subsecretario de Formación y atención al magisterio y, en Pedro Díaz Arias (viejo conocido en la SEJ por su envidiable carrera siendo funcionario a lo largo “de por lo menos” cuatro sexenios), como subsecretario de educación básica, ambos perfectamente identificados y reconocidos entre el magisterio, además de conocedores de la organización y operación pública y secreta de la SEJ y la relación de ésta con las secciones 16 y 47 del SNTE y demás organismos.
Recibirán una SEJ bastante complejizada, con problemas de pago, procesos truncos y resultados educativos deplorables además y como pilón, con un magisterio molesto, denostado y fracturado. Aristóteles Sandoval como gobernador y Francisco Ayón como secretario de educación entregarán las riendas del gobierno el jueves 6 de diciembre, sin haber alcanzado la cobertura universal de la educación preescolar tan prometida en campaña y la vergüenza de haber hecho recortes históricos a la nómina magisterial, acción que a la fecha tiene a un buen de grupos sin maestros y niños sin clases.
Refundar Jalisco en materia educativa no será tarea fácil, sobre todo porque el nuevo secretario de la SEJ llegará a recoger y querer levantar una secretaría en ruinas, saqueada, endeudada, sin rumbo fijo ni proyecto educativo claro, que, si hacen bien las cosas, les tardará por lo menos la mitad del sexenio en reordenar todo el cochinero que reciben y, así poder empezar a influir en la dinámica educativa con el plan educativo que aun no conocemos con detalle, salvo, obviamente lo que presentaron hace unos meses en la Cámara de Comercio de Guadalajara (en plena campaña electoral) y que se centra en medidas como cambiar el modelo educativo de fondo, que en un plazo de seis años todos los niños de 6 años tengan educación y becar a 85 mil estudiantes entre otras cosas, además, de los seis ejes como la revaloración del magisterio, la reingeniería educativa, la educación para la vida, las escuelas eficaces, el sistema de universidades en el estado y la investigación para la innovación.
En su momento señalamos que muchas de las propuestas educativas alfaristas estaban fuera de órbita porque el gobierno del estado no tenía la gobernanza de la educación, pero, para fortuna de la gestión de Alfaro, el triunfo de López Obrador le vino a facilitar las cosas, sobre todo porque ya se anunció que habrá modificaciones significativas a la reforma educativa y, por supuesto al modelo, se becará a los jóvenes y habrá la cobertura total a la educación superior.
Lo cierto de todo es que, hay mucha tarea por hacer, porque (como decía un profesor al que la SEJ le adeudaba tres meses de salario), –la SEJ no puede estar peor con los que lleguen, ánimas que ya se vayan éstos y lleguen otros que sepan hacer las cosas con lo mucho o poco que les dejen los que ya se van–.
¿Qué vemos hacia el futuro para la educación jalisciense?, realmente mucha incertidumbre en términos educativos por la secretaría que reciben y cierta claridad en las decisiones políticas, sobre todo en la elección del nuevo titular de la SEJ, porque finalmente éste no fue ni para las huestes de Raúl Padilla López, ni para las lógicas del SNTE, sino para un personaje que se mueve en otros campos, el de la educación privada y el de las nuevas tecnologías, lo bueno de todo es que los intereses de Juan Carlos Flores Miramontes no van más allá de este puesto y, de las lógicas de esta secretaría, que (por citar a su predecesor), es mucho decir.

*Editor de la Revista Educ@rnos. [email protected]