El desastre educativo de LA realidad mexicana

Andrea Ramírez Barajas*

Hace unos años participé en un Seminario en las instalaciones de la UPN, acerca del giro de-colonial y las epistemologías del sur con el Dr. Ricardo Romo Torres, a quien aprecio y admiro; ahí se reforzó la idea de aprender a pensar en clave femenina y en clave de-colonial.
Lo anterior me sirve de marco para afirmar que el sismo del pasado 19 de septiembre, se ha tornado en un detonador del descontento que llevará a una ruptura social en el México de ahora.
El sismo (aun en medio del desastre justificado y de la tristeza humana) como respuesta de muchos y muchas de nosotras ha servido también para mostrar de manera clara y desnuda los dos méxicos y sus proyectos de nación.
Lo primero que salta a la vista es la incapacidad gubernamental de responder ante la alerta, el desastre y el fracaso de su propuesta estratégica de reforma educativa, y lo segundo es que en el seno del aparato gubernamental nunca ha habido un plan B para responder en caso de desastre o de emergencia, de la reforma educativa su plan B es el mismo contenido de la reforma educativa del Plan A.
Con todo ello asistimos ante el desastre educativo nacional, en donde la obsesión por la evaluación ha servido absolutamente para nada dentro de la nueva realidad nacional. Hoy el sismo nos demuestra que los objetos por evaluarse eran otros, muy diferentes a los que el INEE había agendado.
A partir de lo anterior, es necesario comenzar a gestar un modelo educativo alternativo, que piense en el curso normal del desarrollo social y que cuente con plan de acción en caso de desastre o de emergencia.
En aquel emblemático número e la revista Cero en Conducta en donde se leía “Las escuelas deberán ser las ultimas en caerse”, hoy las escuelas han sido presa de la misma vulnerabilidad gubernamental, sus daños son simbólicos, son pero no se reducen al edificio o a la parte física, reflejan un daño mayor que es institucional, asociado con la crisis del sistema educativo en su conjunto.
Necesitamos aprender a pensar en clave femenina para pensar en LAS acciones a emprender en el proceso de edificación de LA nueva sociedad que hoy ha nacido en este México nuevo.
El nuevo México que se educa se sintetiza en LA nueva sociedad organizada. Un modelo educativo en gestación debe recoger los aprendizajes de esta experiencia trágica, pero mirar a futuro, de entre los escombros de entre las cenizas y en clave femenina construir la NUEVA REALIDAD que México demanda.

*Doctora en educación y consultora independiente. [email protected]