El currículum oculto de la reforma educativa

Mario Ramos Carmona*

“Los antiguos valores de la comunidad, la cooperación,
las necesidades de los individuos y la igualdad de todos,
que según Ball, subyacen a los sistemas públicos
de la educación universal,
se están sustituyendo por unos valores
que aplauden el individualismo,
la competición, el máximo rendimiento y la diferenciación”
(Whitty, Power, Halpin, 1999).

Las reformas llevadas a cabo en EEUU, Inglaterra, Gales, Australia, Nueva Zelanda y Suecia tiene características con un perfil empresarial y romper con los valores de las comunidades; en México también parece haber una orientación hacia la cultura de la competencias, individualidad y saber técnico sin relación con los contextos histórico-culturales de las comunidades. El mismo discurso educativo habla ahora de competencias y no de propósitos u objetivos, competencias genéricas o profesionales en lugar de perfil profesional.
La reforma peñista está pensada para un país que los tecnócratas han configurado desde el sexenio de Salinas de Gortari y que ha tenido continuidad incluso con Fox y Calderón. Es una reforma pensada para un conformar mentalidades colonizadas, adiestradas para servir de forma eficiente a las grandes empresas transnacionales y nacionales que operaran u operan en un México sumamente dependiente del exterior.
Además es una reforma pensada en la aniquilación del nacionalismo y la visión cultural plural. Una reforma que hace a un lado el legado histórico de la nación, que margina la cultura de los pueblos originarios y busca, incluso, borrar la opción de superación intelectual y social a muchos sectores de la nación que han encontrado en el quehacer educativo una forma digna de vida. Esta reforma educativa apuntala la formación de súbditos de los poderes fácticos empresariales, no de ciudadanos libres y responsables.
Además esta reforma está pensada para hacer del espacio de la escuela pública un espacio de negocios privados, desde los alimentos y bebidas que ahí se venden, el mantenimiento de la infraestructura escolar y la construcción de la infraestructura. Los famosos bonos de la iniciativa privada serán una renta fabulosa para los empresarios que inviertan en la construcción, remodelación y manteamiento de la infraestructura escolar, algo que es obligación del gobierno federal y que debe de solventar a través del pago de impuestos, se lo están concesionando a los empresarios como un negocio más.
Con esta política de concesión de la inversión en escuelas, al cual el gobierno federal y de los estados tienen la obligación constitucional de responder, la administración se margina de su obligación de dar educación gratuita, laica y obligatoria. Dejándole esta acciona los grupos de empresarios y concediéndoles las mejores ganancias a su inversión. ¿Por qué la administración no atiende, como es su obligación esta demanda de tener la mejor infraestructura en las escuelas?, ¿esto indica que los problemas de las escuelas son también en infraestructura y no solamente en las prácticas educativas de los docentes?, el curriculum oculto de la reforma muestra un espíritu clasista, prácticas gubernamentales orientadas al beneficio de los grupos empresariales y un desprecio por una educación nacionalista, contextualizada, que potencie los valores de la democracia y la vida comunitaria.

*Profesor-investigador de la Escuela Normal para Educadoras de Guadalajara (ENEG). [email protected]