Cómo construir organigramas en básica
Carlos Arturo Espadas Interián*
Las empresas cuentan con organigramas que permiten tener una visión clara de su estructura, líneas de comunicación, colaboración y autoridad. Las escuelas necesitan el organigrama para tener claridad de sus estructuras y con ello su funcionamiento.
Un organigrama en básica debe iniciar con la Dirección de Educación Básica, Regional, Jefatura de Sector, Supervisión, hasta llegar a la Dirección. Las cuatro primeras son instancias fuera del Centro Escolar, pero a las cuales se encuentra supeditado.
Al interior del Centro Escolar, será necesario identificar a los actores educativos y no únicamente al personal. Quienes laboran en él podrían ser quienes ocupan la Dirección, Subdirección, el profesorado y Personal de Apoyo Educativo (PAE).
El PAE en básica, debería incluir: asistencia al docente, biblioteca (sea ésta en físico o digital), servicio médico, intendencia, mantenimiento, apoyo secretarial, guardianes, entre otros.
Ocupan un lugar especial las Unidades de Servicio de Apoyo a la Educación Regular que es una instancia técnico-operativa de la Educación Especial, conocidos coloquialmente como Personal USAER, que se encuentran de forma permanente o itinerante en los centros escolares, en función del número de estudiantes que requieren su atención.
Los Consejos Técnicos Escolares (CTE), también ocupan un lugar especial, porque se constituyen en órganos académicos fundamentales para la construcción del Programa Escolar de Mejora Continua (PEMC) y programas analíticos, entre otras tareas.
Dentro de los actores educativos hay figuras indispensables: asociaciones de padres de familia y organizaciones estudiantiles –ambos en sus distintos formatos–, también se debe considerar al sindicato.
El organigrama de un Centro Escolar tendrá varios niveles y actores consultivos ligados directamente a la dirección, identificados como staff: sindicato, asociación de padres de familia y estudiantes y, el Consejo Técnico Escolar.
Niveles jerárquicos que trascienden el centro y que se derivan desde la Dirección de Educación Básica hasta la Dirección de la Escuela. Al interior se tendrán varios niveles, profesores, PAE y demás.
Habrá figuras que, aunque están supeditados a la dirección, tienen ciertos niveles de autonomía y deberán figurar con su respectiva simbología, que por su autonomía será diferente a profesores y PAE: personal USAER y a quienes se tiene concesionada la “tiendita” escolar.
La dinámica de un Centro Escolar obliga poco a poco a constituir organigramas tendientes a la horizontalidad y, en algunos casos, hacia la estructura circular. Recordar que estas estructuras expresan trabajos colaborativos.
Un actor fundamental que permanece ausente y que se ha dejado hasta el final, precisamente para resaltar su importancia y ausencia, pues se encuentra fuera del foco operativo de muchos Centros Escolares, es la comunidad. Es necesario que este actor educativo clave, figure en los organigramas.
*Profesor–investigador de la Universidad Pedagógica Nacional Unidad 113 de León, Gto. [email protected]