Congresos como formación
Carlos Arturo Espadas Interián*
Las salidas a congresos por parte de los estudiantes representan espacios formativos que los preparan para la vida académica, a la par de fortalecer su formación desde los temas de actualidad que se encuentran en boga en los distintos centros universitarios.
Dentro de los proyectos institucionales, se deberían de considerar espacios formativos extra-institucionales que permitan a los estudiantes conocer otras formas, lenguajes, códigos e incluso culturas. Con ello, sin decirlo, se trabaja la interculturalidad, pues solo es por medio del conocimiento de otras formas de vida que se puede tener una aceptación a la diversidad, una apertura hacia otras manifestaciones y posiciones.
Así desde lo académico, desde la socialización, en su sentido más amplio, desde la formación humana misma, la asistencia congresos significa una posibilidad irremplazable para nuestros estudiantes. Los presupuestos deben asignarse desde la consideración que la formación es algo más que los espacios escolares limitados por las bardas perimetrales de los recintos universitarios.
Una visión desde esta perspectiva representa el redimensionamiento de la planeación estratégica, la asignación de presupuesto y su ejercicio. De esta forma, la asistencia a congresos, seminarios y demás resultan pieza complementaria para la formación y en algunos casos se convierte en pieza clave de la misma.
En caso de llevar ponencias, carteles u otras formas de participación, se tiene una experiencia aún más enriquecedora, sin embargo, el sólo hecho de asistir genera situaciones de aprendizaje que les serán útiles si se quieren dedicar a la academia, a la logística e incluso si se desea fortalecer valores y demás.
Mientras más diversos sean los congresos, más lejanos –por cuestiones de la cultura–, mientras más temáticas diversas se trabajen, representará una oportunidad mayor de aprendizaje para los estudiantes.
Si el mundo se lee, mientras más posibilidades de lecturas les demos a nuestros estudiantes, mayores formas de entendimiento se generarán en ellos, trascendiéndose no sólo los espacios, formas y contenidos, sino también estructuras relacionales con sus correspondientes variables culturales, así como códigos producto no sólo de un campo disciplinar, sino de formas de ver y entender el mundo.
*Profesor–investigador de la Universidad Pedagógica Nacional Unidad 113 de León, Gto. [email protected]