Evaluar aprendizajes

 en Rubén Zatarain

Rubén Zatarain Mendoza*

El primer trimestre de corte de evaluación formativa de aprendizajes en los niveles de la educación básica, es una primera oportunidad de analizar y ajustar procesos en la perspectiva de mejora.
Al diagnóstico socioeducativo construido al inicio del ciclo escolar hay que agregar la primera muestra de avances y de dificultades de aprendizaje de cada biografía en desarrollo.
La dimensión cuantitativa complejiza la visión sistémica oportuna. La población de alumnos suma más de 1.5 millones de alumnos y alumnas. Tan solo en Jalisco, la práctica de evaluación de maestros y maestras es más que diversa.
Todo parece indicar que hay camino y brechas por acortar en materia de cultura evaluativa, en especial en evaluación formativa de los aprendizajes y las enseñanzas, en materia de campos formativos y ejes integradores.
Difícil tarea promover aprendizajes en el marco de una didáctica respetuosa del interés de quienes aprenden, que no se enmarca temporalmente a los objetivos de profesores y escuelas y a los objetivos operacionalizados a manera de contenidos y procesos de desarrollo de aprendizaje en los programas sintéticos.
El plan y programa es brújula. El timón y la dirección la marca el educando con el auxilio de la educadora o el educador.
Difícil educar en tiempos y movimientos, cuando los perfiles grupales y de educandos son heterogéneos y cuando la cualidad curricular es la gradualidad de la complejidad en materia de contenidos.
En una perspectiva de medición y de emisión de calificaciones: ¿Hasta donde se trazan los puntos de llegada y desde cuáles puntos de partida? ¿Cuánta autonomía profesional y autonomía curricular se ejerció y qué resultados se obtuvieron con el diseño curricular explícito en el programa analítico? ¿Cuál fue el punto de partida en el plano didáctico? ¿Para todos está claro el punto de llegada en la planeación didáctica?
En esta semana de consejos técnicos de zona y del Consejo Técnico Escolar, agregados a los temas propuestos en las orientaciones nacionales y consideraciones estatales, de ejes articuladores y de retroalimentación del programa de mejora, evaluar aprendizajes, se torna central y necesario en esta coyuntura de los primeros tres meses de trabajo formativo.
En la propuesta curricular 2022 vigente, la construcción de la noción de campo formativo y el procesamiento del sentido de conceptos, como el de eje articulador, seguramente serán temas que concurran en la evaluación formativa de aprendizajes y enseñanza.
A superar la práctica de evaluación tradicional con técnicas e instrumentos heredados de la larga tradición de medición en el marco del conductismo. A construir y transformar una cultura de evaluación y redireccionarla hacia el humanismo pedagógico centrado en el sujeto que aprende, el aprendizaje significativo y la contextualización de las barreras de aprendizaje y participación.
Un trimestre de evaluación, los números en las boletas y sus significados, los ajustes al plan de mejora, los ajustes al programa analítico y a la planeación didáctica.
Los procesos formativos continúan desde esta semana, una vez que se han registrado en la plataforma las calificaciones.
La lectura que harán los padres de familia de los desempeños, las lecturas de cada uno de los maestros para identificar las áreas de mejora, la lectura de los propios educandos en su agenda formativa.
Los avances, los retos para el segundo trimestre, cuyo tiempo preciado ya corre.
Las escuelas y sus dinámicas, la cotidianidad, las aulas, en donde ya lucen algunas decoraciones navideñas.
En el contexto y en el territorio, la presión institucional sobre los maestros y maestras, en un acto de apariencia por el interés superior de las y los niñas, niños y adolescentes.
La última reunión de la región aconteció ayer en la región Costa Sierra Occidental. La exposición y la escucha parcial en una micropantalla en auditorio amplio del Protocolo de actuación escolar para la prevención, detección y atención en casos de violencia contra niños, niñas y adolescentes del estado de Jalisco, que ha creado su propio laberinto burocrático y en el fondo impacta la valorización social del magisterio.
Los protocolos en el marco de la “Cultura de la paz” que han de cuidar, no violentar la profesionalidad y dignidad del magisterio y de los trabajadores de la educación y que, ausentes de evaluación institucional seria y datos, parecen no corregir el mal deseado, ni tampoco disuaden los malos comportamientos cuando los hay.
En el contexto y el territorio: la glosa de un sexto informe de gobierno con un congreso amurallado y de ausencia de actores. En materia educativa, tiene zonas opacas, mensajes orales y prácticas de resistencia a todo lo que huela a Nueva Escuela Mexicana.
En una especie de primera infancia en la administración pública del sector, se golpetea en publicidad caprichosa y se presume y se aspira a convencer en egocentrismo incorregible un modelo inexistente en materia de desarrollo educativo llamado Recrea.
No, no lo explica todo la pandemia. Hay algunos y algunas responsables de 6 años de inmovilismo y de un continuum jalisciense cimentado en el sincretismo conservador de la reforma educativa peñista refundada.
Los datos en materia de indicadores de calidad y confianza ciudadana han de desdecir la sensación de triunfalismo en materia educativa.
Han de mostrar evidencia y corpus que desdiga también 6 años de desaparición forzada de las buenas ideas pedagógicas y de los buenos resultados evidenciados en indicadores de calidad.
No hubo cambio de formas ni de fondos en seis años; ni siquiera se dio cristiana sepultura a las simulaciones y eventos de agradecimiento de último momento como el realizado hoy por la mañana en el hotel Holiday Inn de Guadalajara “Reconocimiento al compromiso con la educación ¡Celebremos lo aprendido¡ Cuyo entramado de fondo (egoteca justificatoria de algunas(os) fue la presentación de la colección Recrea y el conversatorio Colección Recrea).
El sexto informe de gobierno gris en el foro de un Palenque, el acto simbólico de un gobernador hincado y en acto de lágrima y persignación, la oralidad emotiva de la frase sin citar tomada de Gustavo Cerati del grupo musical Soda Stereo “gracias totales”; la lejana fotografía valentona retadora en la rotonda de los hombres y mujeres ilustres, la posición estéril en la CONAGO, la pandemia y la muerte de Giovanni López, el cacho de pizza y el whiskito; el deceso del ex gobernador Aristóteles Sandoval.
La secuela: El falso grito de la imposible independencia del pacto fiscal, pensar-se y actuar-se como estado rico en un obtuso egocentrismo de un primer infante movimiento ciudadano como proyecto de gobierno hábil para la maña electoral.
La independencia fiscal como acto de terquedad o cumplimiento o como acto anticipado de campaña para el 2030, o como preparación del terreno al sucesor para nuevos e impunes endeudamientos.
Retirarse de la cancha de juego nacional del pacto fiscal al cuarto para las doce como acto de reciclado de ideas de oficina recaudatoria insaciable; la amenaza como patología oftalmológica y como acto de ausencia de solidaridad para las entidades federativas que menos tienen.
La evaluación de aprendizajes, primer acto de tres en el ciclo escolar, mientras los maestros y maestras esperan desapasionadamente la tercera sesión del Consejo Técnico Escolar; circulación masiva de la carta de ayer de la presidenta mexicana al presidente electo Donald Trump de Estados Unidos sobre aranceles, migración y drogas; la Universidad de Guadalajara en estreno de flamante rectora, mientras la definición del titular de la Secretaría de Educación en Jalisco para el gobierno de Pablo Lemus se mantiene en total hermetismo.

*Doctor en educación. Profesor normalista de educación básica. [email protected]

Escriba su búsqueda y presione ENTER para buscar