Ni un niño, niña, adolescente, joven y adulto sin acceso a Educación y Cultura (parte1)
Rafael Lucero Ortiz*
“La falta de acceso a una educación
de calidad es una de las principales
causas de la pobreza a nivel mundial,
pues sin educación, hay menos
posibilidades de conseguir empleos
bien remunerados, lo cual perpetúa
la pobreza” World Vision.
Esta propuesta surge, como muchas otras (1), de una iniciativa ciudadana, frente a los cambios de los gobiernos federal, estatal y municipal, así como los Congresos correspondientes. La pretensión es que para los próximos seis años se construya una política pública, con público ciudadano, que se ponga a consideración en la mesa de las decisiones del Plan de Desarrollo Estatal, de los programas y la cuenta pública del estado y los municipios. Para que juntos, federación, estado, municipios y agentes de la sociedad civil, desde sus propios territorios, sea promovida, monitoreada y exigida por el conjunto plural de la Sociedad Civil Organizada y gobiernos.
Este es el capítulo, que integra un decálogo de diez Derechos Humanos imprescindibles, que debemos atender en este período 2024-2030 de los déficits de DDHH, que nos urgimos atender con la participación de ciudadanos y los nuevos gobiernos.
Los diez capítulos articulan diez derechos fundamentales, hasta ahora deficitarios, que a su vez interactúan con los diez y siete Objetivos de Desarrollo Sustentable, ODS, contenidos en la Agenda 2030 y suscritos por el gobierno mexicano y que, según el último informe, es urgente que atendamos.
El eje central tanto de los DDHH, como de los ODS, es la “Erradicación de la pobreza”. Por ello, nos proponemos en la construcción plena y universal del derecho a la educación que: “Ni un niño, niña, adolescente, joven y adulto quede sin acceso a Educación y Cultura”.
Pobreza y desigualdad en Jalisco
Para avanzar en la cobertura universal de los DDHH, es necesario partir en los territorios y con las poblaciones de mayores déficits de derechos, la situación de pobreza en nuestro estado nos interpela a que atendamos los territorios y poblaciones en situaciones extremas, dónde educación y pobreza interactúan de manera imbricada.
El “Informe Jalisco de Pobreza y Evaluación 2020 del CONEVAL” da cuenta de la situación en cada territorio municipal y el tamaño y grado de la población afectada. Acudiremos a los datos del informe para un ejercicio de prediagnóstico, que se contextualizará por los pobladores en sus propios territorios, necesario para focalizar las prioridades en territorios y poblaciones de atención para la ejecución de programas y presupuesto público requerido.
Población total del estado de Jalisco: 8,348,151 personas que se distribuyen según sexo en 49.1% hombres y 50.9% mujeres.
El porcentaje de pobreza en Jalisco es 13.5 puntos porcentuales menor que el porcentaje nacional de 41.9%.
En el año 2018, el porcentaje de población vulnerable por carencias sociales en Jalisco fue de 36.5%, es decir, 3,002,700 personas; al mismo tiempo, 7.7% de la población era vulnerable por ingresos; alrededor de 629,700 personas no tenían los ingresos suficientes para satisfacer sus necesidades básicas; pobres moderados, 2,093,100 personas, 25.5%; en pobreza extrema, 3% 244,500 personas, y no pobres y no vulnerables, 2,252,600, el 27.4%.
En el 2015, son seis municipios que presentan condiciones de extrema pobreza, con un 70% de su población; al norte del estado, Mezquitic, -en el lugar catorce de los municipios de mayor pobreza y más alto índice de marginación en el país-, San Martín de Bolaños, Chiquilistlán; Atemajac de Brisuela, Hostotipaquillo y Chimaltitlán.
Del 2010 podemos agregar: Atengo, Santa María del Oro, Mexticacán y Zapotitán de Badillo. Entre los diez municipios concentran el 7.9% de la población total del estado.
Por el contrario, 5 municipios de la ZMG: Guadalajara, Zapopan, Tlajomulco de Zúñiga y Tlaquepaque, concentran el 45.8 de la población en pobreza.
El Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas de la Universidad de Guadalajara identifica en este municipio las colonias El Jagüey, Rancho Nuevo, Balcones de Huentitán, Lomas del Paraíso I y II, III y El Bethel, San José Río Verde, Jardines de la Barranca; el Coneval identifica las colonias Tetlán, Lagos de Oriente, San Joaquín, La Campesina, Los Arrayanes y El Laurel y concentra una población de 1,465,547 hasta el 2019.
En el municipio de Zapopan, la pobreza se concentra en localidades y colonias: Santa Lucía, Lomas de Tizate, Colinas de la Primavera, Vistas del Centinela; Agua Fría, Mesa de los Ocotes y Junta de los Ocotes; la Coronilla, la Higuera, El Fortín y parte de Lomas de la Primavera.
En el municipio de Tlaquepaque, más de 7 mil 200 personas, están en el rango de entre 70 y 100% de su población, distribuidas en conjunto de manzanas del Cerro del Cuatro, lomas del Cuatro, La Cofradía, Las Liebres, La Piedrera, Solidaridad, San Juan, Parques de la Victoria, Buenos Aires y Francisco I Madero.
En el municipio de Tlajomulco se concentra la pobreza en Unión del Cuatro, San Lucas Evangelista y San Sebastián el Grande.
En el municipio de Tonalá, más de 132 mil personas, entre el 70 y 100% viven en pobreza, en las colonias de Agua Escondida, Osorio Comunal, Villas de Oriente II y Las Puertas.
El mismo documento de World Vision asocia como factores que provocan la pobreza a desigualdades económicas, falta de educación, desempleo y subempleo, problemas de salud, conflictos y violencia.
La crisis del neoliberalismo deja ver la interacción de factores más de fondo, como la sobre explotación del trabajo humano, la especulación del capital, la desmedida concentración de la riqueza y la depredación de los recursos naturales.
En este contexto es que proponemos cinco líneas de acción inaplazables:
1. Acceso a un sistema integral de cuidados de la primera infancia, -desde que se detecta el embarazo hasta los tres años-.
2. Acceso de toda la población a Educación Básica.
3. Acceso de toda la población a la Educación Media Superior.
4. Acceso de toda la población a la educación superior.
5. Crear un sistema de educación compensatoria, a través de la oferta de expresiones culturales diversas, que restituya el derecho al ejercicio pleno de la ciudadanía activa y el fortalecimiento del tejido social.
Esta Iniciativa Ciudadana está abierta para poderla enriquecer con la participación de ciudadanas y ciudadanos interesados. El mecanismo es sencillo; pueden enviar sus aportaciones, en formato libre, al e-mail al calce o al de esta Revista.
*Maestro en Sociología. Analista y consultor independiente. [email protected]