Los “nuevos” perfiles profesionales

Graciela Soto Martínez*

En Diciembre de 2020 se publican los Perfiles Profesionales, Dominios, Criterios e Indicadores para el personal docente, técnico-docente, directivo y de supervisión, lo hace la Unidad del Sistema de la Carrera de las Maestras y los Maestros, se enviaron con la recomendación de una amplia difusión, sin embargo, no se ha propiciado un análisis serio o profundo de los nuevos perfiles, en una primera mirada plantean una continuidad con los anteriores, desde el nombre, sólo se cambia la palabra “Dimensión” por la de “Dominio”. Hay que realizar de forma más fina el análisis para encontrar en este documento los pilares de la Nueva Escuela Mexicana (NEM).
Cubrir un perfil puede ser fundamental para el cuidado de la vida, así sea a nivel profesional o técnico. La ingeniería o la medicina dan cuenta de ello. Del tema ya tenemos antecedentes, por ejemplo, ante cualquier afección atiende un doctor general pero en caso de un problema especifico en algún órgano vital requerimos un especialista en ese campo del conocimiento. Su perfil y formación científica deben ser acordes a la parte del cuerpo humano que tratan.
En la política, ya sabemos que el perfil no es relevante, no hay una definición clara de lo que es ser un político o funcionario, cuyas acciones son legislar, aplicar la ley o ocupar un puesto de gobierno; no está en los requisitos los perfiles profesionales o personales que se necesitan para participar. Se ha observado que la elección de los representantes se realiza por varios métodos, por relaciones sociales, políticas, económicas, por designación de más arriba y otras maneras que no están claras. Por ello padecemos estos perfiles, ya que las decisiones tomadas no son congruentes con los retos sociales.
En educación, el antecedente de perfiles fue en 2013, se publicaron como referentes para la evaluación punitiva y del desempeño. Estaban conformados en 5 dimensiones, las cuales integraban criterios e indicadores. A partir de este documento se elaboraron las pruebas estandarizadas y los otros instrumentos que tenían un valor asignado y del cual el resultado era fundamental para poder aprobar, ya que de no hacerlo te podía costar el empleo y la profesión.
En el Marco para la Excelencia en la Enseñanza y la Gestión Escolar en 2020 se publican los nuevos perfiles como referentes para las promociones, algunas diferencias son los dominios, antes dimensiones, que van a incluir los otros elementos, otra distinción es que sólo son 4, en estos se integran y detallan los componentes de una gestión ideal de docente, técnico-docente, directivo o supervisor.
El perfil no detalla un saber enciclopédico o de almacenamiento de información, pero si subyacen diversos saberes y competencias profesionales que son el sustento del dominio. Por las guías de estudio publicadas para la promoción vertical a director y supervisor se puede observar que la bibliografía de estudio si está enfocada en un saber memorístico o bancario, más que analítico o reflexivo, a partir aproximadamente de 50 documentos se van a elaborar los reactivos, en los cuales se busca la respuesta correcta más que el enseñar a pensar o la transformación de las escuelas.
Es preocupante que estados como Jalisco lleven propuestas alternas y descuiden los contenidos que a nivel nacional se están desarrollando relacionados con los perfiles profesionales, por ello se puede estar en desventaja si no vincula con un contexto nacional.
Los perfiles se centran en las figuras de docente, técnico-docente, directivo o supervisor que deben tener conocimientos, habilidades y valores específicos organizados en 4 dominios como se detalla a continuación:

1. Asume su práctica y desarrollo profesional con apego a los principios filosóficos, éticos y legales de la educación mexicana; el conocimiento del Artículo 3º y la Ley General de Educación, ambas leyes reformadas en el actual gobierno, proteger los derechos de los niños, niñas y adolescentes es el punto central. Quien no conoce sus derechos no los defiende, quien no sabe de leyes puede ser engañado, su ignorancia no lo exime de responsabilidad. Conocer y aplicar la ley para ejercer el derecho a la educación es fundamental.
Los organismos de derechos humanos tienen un enfoque de responsabilizar a la escuela y sus actores educativos de situaciones del contexto, lo quieren convertir en un vigilante o policía de la escuela con el afán de brindar seguridad y protección a los niños. Este tema requiere ser tratado con más amplitud ya que se trata de trabajar conjuntamente y no culpabilizar al docente.
2. Reconocer la importancia de la función para construir una cultura escolar basada en la equidad, la inclusión, la interculturalidad y la excelencia. Éstas son las políticas educativas vigentes que se busca promover. La escuela como espacio para la diversidad social, cultural y lingüística. Ésta es la lucha por reconocer la discriminación, la pobreza, falta de oportunidades, la exclusión, que en tiempos de pandemia se han agudizado más.
3. Organizar el funcionamiento de la escuela como un espacio para la formación integral de los niños, niñas y adolescentes, se enfoca en la transformación tanto de las condiciones del aprendizaje como de los edificios y de la capacitación y formación continua. Éste sería el dominio sustantivo donde se aborda el aprendizaje y la formación integral. En este dominio se integró la formación continua que está desarticulada y carente de estrategias de la andragogía.
4. Propicia la corresponsabilidad de la escuela con las familias, la comunidad y las autoridades educativas donde las palabras clave son vinculación y colaboración. Esta alianza familia-escuela está presente durante la pandemia, se ha dejado el juicio sumario a los maestros para trabajar de la mano con ellos.
La gran ausencia de un dominio es la formación continua o la capacitación, en los otros perfiles de 2013 había una dimensión específica en la que señalaba un docente o directivo que se reconoce como profesional y mejora continuamente. Esto ahora se incluye en un dominio como parte de un indicador; faltan políticas más precisas para fortalecer la asesoría y capacitación de los profesores y directivos en servicio.
Muchos cursos y diplomados cuentan hoy con el apoyo de la tecnología, sin embargo, algunos no se pueden considerar como capacitación, ya que sólo se cuelgan de una plataforma presentaciones con power point, lecturas y formularios; esto se puede convertir en simulación. Hay que recordar que educar es un proceso humano, de interacciones, donde se construye el conocimiento a partir de mediaciones.
Se corre el riesgo de que el estudio de los perfiles sea para buscar el ingreso o una promoción ya sea vertical u horizontal, que se estudien sus contenidos para el examen y se descuiden las prácticas y los procesos de enseñanza-aprendizaje. Los que están difundiendo los perfiles son maestros youtubers que a través de sus canales los abordan, es paradójico que sean estos medios y no las instituciones quienes ofrezcan el análisis o estudio.
La sensibilidad docente, la entrega y sentido profesional va mucho más allá de un perfil. Lo que cada uno sabe y hace se va a reflejar en los resultados de los aprendizajes de los alumnos de su aula, escuela, zona o sector, esto deben ser los referentes principales para determinar o cualificar el perfil profesional y para definir los estímulos.

*Doctora en Educación. Jefa de Sector de Educación Preescolar en la SEJ. [email protected]