La jubilación, anhelos y desilusiones
Graciela Soto Martínez*
“Como te ves me vi, cómo me ves te verás” refrán popular
Al ingresar al servicio educativo como trabajador de la educación el día de la jubilación parece muy lejano, es una línea perdida en el horizonte, se vive lo cotidiano con todos sus azares, no se puede pensar en jubilarse porque hay frustración, sin embargo, cada año acumulas tiempo, los días pasan incesantes, tienes tus grandes momentos y los pasajes grises, pero el reloj sigue avanzando inexorablemente. Jubilarse sigue siendo una decisión personal que unos apresuran, en cuanto cumplen lo estipulado por la ley anuncian su salida y los que se resisten y tienen diversos apegos, por lo cual siguen en servicio.
Las leyes indican cuando podemos iniciar este trámite, establecen los tiempos mínimos laborales para poder gozar del beneficio de retirarte y del placer de realizar otras cosas. La legislación que se ha emitido desde las cámaras de diputados y senadores han ampliado el tiempo de trabajo por la productividad del país y por el costo que tiene el pago de una jubilación, no se podía esperar otra cosa de los regímenes neoliberales, el establecer principios de costos, rendimiento y ganancias, además que la corrupción o el manejo de los fondos de retiro pone en riesgo garantizar este derecho.
Una evidencia de la política económica neoliberal fue el cálculo de las pensiones en la Unidad de Medida y Actualización (UMA), la cual estuvo vigente por 3 años. Un trabajador agremiado al SNTE promovió una lucha jurídica por la aplicación de su pensión en UMA, aunado a otros amparos promovidos con dicho fin, obteniendo el resolutivo que debe ser en salarios mínimos, con ello establece la jurisprudencia para que los demás pensionados y jubilados sigan este camino legal en la aplicación del beneficio. Esta noticia ha esperanzado a muchos compañeros que habían visto disminuido injustamente su ingreso y que se sentían desprotegidos o abandonados de las leyes en un marco de neoliberalismo dictatorial.
Las buenas noticias de este 26 de septiembre de 2019 es que la Suprema Corte de la Nación invalidó el cálculo de las pensiones con base en la UMA lo que da paso a incrementar en un 20% el monto de su ingreso. (https://www.informador.mx/mexico/Corte-determina-20-mas-para-los-pensionados-20190926-0021.html). Esto había sido originado en 2016 a partir de una reforma constitucional de desindexación del salario mínimo estableciendo la UMA para conceptos jurídicos como multas o créditos y aplicada en pensiones de manera arbitraria. Ésta es otra reforma que cae ayudando a un modelo de justicia social. Este tema nos invita a reflexionar sobre la preparación de cada uno para esta etapa.
Las pensiones tienen su origen en Alemania con Otto Von Bismarck que creó un sistema de seguridad social para ayudar a la situación socioeconómica de pobreza y descontento, es hasta después de la Primera Guerra Mundial que se extiende la idea, en México se contempla en la Constitución de 1917, en 1944 con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en Filadelfia reconoce la necesidad de garantizar un sistema digno de pensiones, en 1945 se incluye en la Declaración Universal de los Derechos Humanos (https://www.eldefinido.cl/actualidad/mundo/7226/Pensiones-en-el-mundo-sus-origenes-y-diferentes-modelos/).
Los sistemas de pensiones en México están regidos a nivel Federal por una pluralidad de leyes que se desprenden del Artículo 123 Constitucional y que incluyen la Ley del Seguro Social (LSS); la Ley de los Sistemas de Ahorro para el Retiro (LSAR); Ley de Protección y Defensa al Usuario de Servicios Financieros (LCONDUSEF); y la Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (LISSSTE). Algo que se menciona reiteradamente es que los sistemas de pensiones se crearon cuando la expectativa de vida era menor y es en los 80, que se observa que esto repercute en el sostenimiento económico de los trabajadores en retiro, por lo que se observa en insostenibilidad del sistema de pensiones. Esto es un asunto de los gobiernos y de las leyes que nos compete a todos (file:///C:/Users/3PX67LA_RS4/Downloads/CESOP-IL-14ESTPensionesyJubilacionesenMexico.pdf).
Las luchas sociales que buscan derechos y beneficios para los trabajadores han pugnado porque al término de su vida laboral el trabajador goce de calidad de vida, eso representa un gasto social aunque se cotizó y ahorro con este concepto. Con el nuevo gobierno existe cierta expectativa de que se modifiquen nuevamente los planes de retiro, para garantizar que las próximas generaciones puedan tener también este derecho, ya que los contratos temporales, el outsorcing, no contemplan este beneficio, se pide además que se revisen la cantidad de años de trabajo para tal fin pidiendo que regrese a 28 años en mujeres y 30 en los hombres.
No se trata sólo de revisar el monto económico con el que nos iremos, es ir preparando esta etapa de manera integral, con 30 años de anticipación, el Estado tiene la obligación de prever el sistema de pensión y jubilación, además es también una preocupación colectiva y de las organizaciones, sin embargo, es asunto personal cómo vamos a vivir o a padecer lo que nos espera el día que nos retiremos del trabajo.
El anhelo de realizar cosas para cuando llegue ese día como lo es viajar, hacer ejercicio, aprender una habilidad, dedicar tiempo de calidad a la familia, cuidar nuestra salud, hacernos una cirugía o todas los deseos que tengamos y que decimos lo haré cuando me jubile, esto no debe ser en tiempo futuro, es presente, no esperar a la jubilación para cumplir los sueños sea cual fueren, esto se puede incluir con una adecuada organización del tiempo o al menos intentando equilibrar la vida laboral con las aspiraciones personales.
Un principio es cuidar la salud física desde el primer día de servicio, con la alimentación y el ejercicio, combatiendo el mal del siglo que es el estrés, tratando con seriedad y responsabilidad las enfermedades que pudieran presentarse. sino la jubilación será para atender todas las citas médicas de especialidades de las diversas dolencias acumuladas por descuidos o el desgaste natural, aunque se dicen enfermedades propias de la edad hay personas que mantienen excelente estado físico y otras que han sido omisas hasta que el cuerpo les pasa factura.
Lo económico es punto importante, el cual puede ser un factor decisivo en la decisión de jubilarse, es desventajoso para algunos, los trabajadores federales tienen un tope de salarios mínimos para quienes están regidos por el décimo transitorio, o bien si tienen una Afore que les garantice un monto suficiente, los trabajadores estatales obtienen el promedio de su sueldo del último año, sin quitarles algunos impuestos, esto es fundamental y define el permanecer en el servicio educativo o bien, ir por la hoja de servicios a Palacio Federal para iniciar los trámites, esto nos lleva a preguntarnos, ante los montos actuales que establece la ley de retiro que nos aplique, ¿es suficiente la pensión para vivir con dignidad el tiempo restante de vida?, ¿este monto garantiza lo que solicita el derecho humano o bien que decisiones tenemos que tomar?, recordemos la fábula de la cigarra que prepara su granero para el invierno y también eliminemos las codependencias familiares que no permiten que alguien se retire porque aún en esta edad arrastra dependientes económicos.
¿Cuál es la preparación emocional que se tiene para enfrentar esa etapa?, éste es otro aspecto a considerar, que tiene que ser trabajado y en donde cause mayor dificultad buscar la ayuda psicológica necesaria, si bien estudiamos para formarnos como docentes los años de la carrera y luego trabajamos al menos de 28 a 30 años en adelante, va a ser normal que se pase por una etapa de duelo o de pérdida y que posteriormente se viva con gran alegría esta nueva oportunidad de gozar de libertad en el campo laboral.
Como trabajadores en activo nos corresponde apoyar las políticas públicas que contemplen la protección de derechos de la etapa de jubilación, porque muchos trabajadores permanecen ajenos a los problemas del grupo de pensionados y jubilados, hay que sumarnos a la revisión de sus condiciones, a que tengan calidad en sus servicios médicos, que se les otorguen ajustes económicos a la pensión de acuerdo con la inflación, a que se les ofrezcan oportunidades de realización.
Otro pendiente es que como sociedad con los pensionados y jubilados es que tenemos que valorar el regalo de sabiduría que poseen, es importante incluirlas en otros aspectos de la vida atesorando su experiencia, crear y generar espacios en que ellos puedan compartir sus saberes y tengan tiempo de disfrutar de otras cosas, el que sean los empacadores o cerillitos en las tiendas departamentales o extiendan su mano para pedir limosna indica que somos omisos y desagradecidos de los mayores. Volteemos a ver a las culturas que cuidan a sus ancianos sabios y les escuchan, recordemos que cualquiera que sea la edad que tenemos para allá vamos, a una edad de la plenitud, esto si somos afortunados en llegar a ella.
*Doctora en Educación. Jefa de Sector de Educación Preescolar en la SEJ. [email protected]
Felicidades un muy completo y buen articulo .
Gracias es un análisis muy completo y sensibiliza para reconocer la realidad de los jubilados y pensionados
AMLO cuando vas a eliminar el UMA de las pensiones del ISSSTE e IMSS, has hecho caso omiso del dictamen de la judicatura, algunos jubilados con la pensión minima, no les alcanza para comer, todo ha subido más de un 40% en ropa y alimentos.