Comprender inercias, potenciar el cambio

 en Rubén Zatarain

Rubén Zatarain Mendoza*

Disipado el momento electoral y por los resultados del mismo la previsible continuidad del proyecto educativo de la Nueva Escuela Mexicana a nivel nacional, es tiempo de seguir la tarea colectiva y concentrarse en el segundo piso del sector.
El proceso de cambio de mentalidades y de transformación de la práctica educativa, la formación del espíritu científico y el pensamiento crítico en docentes y educandos está en ciernes.
Este proceso por su amplitud y dimensión será lento y gradual, la cuestión pedagógica no es asunto que se resuelva con rapidez cuando se trata de educar de manera contextual y territorializada, cuando la perspectiva es la formación del pensamiento crítico, la descolonización y la emancipación de la masa de niños, niñas y adolescentes del país.
Hay una reforma curricular en marcha y en proceso de asimilación, en proceso de incorporación de contenidos y procesos de desarrollo y aprendizaje al mundo del aula, hay matices del cambio mismo por la particularidad de cada entorno y escuela.
Educación y política educativa, vida nacional y política, elecciones y resultados oficiales, el Instituto Nacional Electoral e institutos homólogos en los estados en cuarto intermedio de trabajo apresurado, la contabilidad de los votos, el PREP y su actualización permanente.
Los maestros y las maestras de Jalisco parece que votaron menos masivamente que en el 2018, pues en aquel 2 de julio una causa aglutinadora fue ponerle fin a la mal llamada reforma educativa.
Hoy, el malestar sobre los procesos de USICAMM, o el malestar estatal sobre Recrea en su versión onírica hacia el 2040 no sumó como causa común entre maestras y maestros, como expresión de todas las voluntades.
El aumento de salario histórico 2024 anunciado hace apenas unos días no ha tenido la gratitud de muchos; muchos votos tiraron para el monte y la masa crítica participativa y politizada esperada quedó para “Otro día con más calma y fresco”.
Esta ocasión no hubo una causa común y el magisterio plural, como históricamente ha sido, ha dividido su voto. El protagonismo del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación en algunos estados a favor del proyecto de la Cuarta Transformación, el protagonismo de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación con una agenda política de distanciamiento del morenismo en El Zócalo y entidades, como Chiapas y Oaxaca, fueron notas en la coyuntura de campaña y proceso electoral concluido el domingo.
No fue el caso de las Secciones 16 y 47 del SNTE que camaleónicamente o sin pudor hicieron campaña al lado de los candidatos contrarios a la alianza “Sigamos Haciendo Historia”.
La “voluntad popular” libre, comprada, coaccionada o manipulada se ha impuesto y ahora para darle viabilidad a los proyectos de gobierno se requiere la concurrencia de los mejores talentos y de mexicanos honestos.
La gobernabilidad es asunto de ganadores y no ganadores, es asunto de ciudadanos y ciudadanas comprometidos.
En el marco del liderazgo que cada educador y educadora es y representa, su contribución para cerrar el presente sexenio es fundamental. También lo es para la construcción de la bisagra y la transición; el protagonismo de la mujer inteligente, participativa, constructora y organizada se avizora en el horizonte.
La agenda de politización del gremio magisterial y la concreción del cambio que convoca en la perspectiva de continuidad de la Nueva Escuela Mexicana, están en marcha.
En Jalisco la propuesta RECREA debilitada en un gran sector del magisterio pese al sueño futurible de 2040, parece ser escenario por otros seis años más, hasta que el resultado oficial del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana así lo confirme.
Sigue siendo tema de corrillo y objeto de analistas el pasado proceso electoral del 2 de junio de 2024, lo será más adelante, la microhistoria y los análisis completos están por escribirse; los temas diversos como el origen, la ruta del dinero y el financiamiento de las campañas tendrán que documentarse.
Hay optimismo y alegría en un amplio sector de electores, los resultados finales generan reacciones, es ineludible. El moderno ciudadano observa, se informa y ha de sumarse una vez concluido el proceso electoral, una vez asentado el polvo y una vez que siguen su ruta algunas de las denuncias que en el calor de los debates se dieron a conocer.
Habrá que reflexionar y medir el impacto de la participación activa de algunos representantes del clero católico y otras alternativas religiosas como la Luz del Mundo. Reflexionar sobre su militancia que rebasa el derecho a voto individual (en Jalisco hay testimonios verbales) ante un Estado mexicano tolerante, inclusivo, demócrata y permisivo que teóricamente ha de velar por la separación Iglesia-Estado.
La apertura tardía de algunas casillas.
La compra de votos desde $ 500 con foto demostrativa.
Los conatos de violencia el día de elección y antes en algunos municipios como Jilotlán de los Dolores, Zapotlanejo y La Barca por mencionar algunos ejemplos.
En los días postelección, las amenazas contra la integridad denunciadas por el candidato Maynez en Nuevo León, por el lamentable suceso de la muerte de algunos participantes en uno de sus eventos de campaña.
La “voluntad popular” se ha impuesto y ha definido con su voto el camino que quiere recorrer el próximo sexenio.
Sobre el concepto de voluntad popular nuestra constitución como garante, su importancia en las democracias representativas desde aquella aportación de Jean Jacques Rousseau en su texto clásico del Contrato Social, donde plantea esta máxima de práctica política; al elegir a sus representantes el pueblo materializa su voluntad.
El contrato social y el derecho natural al que se refería John Locke en democracias como la mexicana, en democracias como la jalisciense.
La fuerza de las instituciones para garantizar procesos limpios y transparentes. El tufillo local de alcantarillas y basura por doquier en diversos puntos de las ciudades de Guadalajara y Zapopan.
La elección del elector después del menudo o la misa dominical. El debate que viene, la satisfacción que tendrá que ser mayoritaria cuando se hace bien la tarea.
La marea rosa convocada al Zócalo el 9 de junio en la CdMX y otras ciudades, el enojo guinda en Jalisco, el voto por voto, casilla por casilla que susurra y grita, el INE no se toca en el archivo.
Los puntos sobre las ies y los números que habrán de confrontarse en ida y vuelta, el escrutinio necesario cuando la democracia circular se impone, cuando se escribe una página muy importante de la historia nacional y estatal.
El tiempo de gobernar que viene, la necesaria comprensión de las inercias por superar, potenciar el cambio en el marco de la unanimidad imposible; la concurrencia de las mayorías al lado de sus propias causas, el lado femenino en el poder ejecutivo que pronto veremos como proyecto de gobierno nacional; el estado insular previsible de la gobernabilidad en Jalisco cuyo caso habrá que seguir con lupa en la antesala de su 201 aniversario.

*Doctor en educación. Profesor normalista de educación básica. zatarainr@hotmail.com

Deja un comentario

Escriba su búsqueda y presione ENTER para buscar