Tutoría sistemática
Carlos Arturo Espadas Interián*
La tutoría necesita ser sistémica para permitir cruces de información para la construcción de proyecciones que alerten a la figura tutorial para realizar acciones concretas, oportunas y eficaces. La tutoría, además de estrategias y técnicas de estudio, llega a espacios de atención directa en aspectos como deserción, escucha, orientaciones diversas, toma de decisiones y otras que escapan de lo escolar para ubicarse en ámbitos cotidianos y personales.
Las canalizaciones son frecuentes para que el estudiantado reciba orientaciones y apoyos financieros, académicos y de salud en general. Estas canalizaciones dependerán directamente de los servicios que brinde directamente o por convenios la institución educativa en cuestión.
La tutoría se debería realizar de forma individual, colectiva y grupal, para cada caso, es indispensable la existencia de un tutor que construya su plan dependiendo del ámbito de acción, pero el tutor que tenga asignaciones individuales y grupales, debería serlo desde el ingreso y hasta el egreso de una generación, para poder conocer al estudiantado en sus casos particulares y trazar líneas de acción específicas.
Como el conocimiento de las necesidades no puede ser únicamente a partir de percepciones, un tutor necesita tener acceso a información académica que le permitan trabajar en favor de la permanencia, mejora de desempeños académicos y egreso. La información emana, entre otras de:
1. La docencia: inasistencias, justificaciones, permisos, llegadas tarde y asistencias;
2. Servicios escolares: solicitudes de baja temporal o definitiva, tiempos de egreso, condiciones a partir del reglamento aplicable, materias dadas de alta, en recursa, aprobadas en extraordinario donde se informe la oportunidad en turno o en la que se ha acreditado, solicitudes de constancias, documentos no recogidos y demás;
3. Centros documentales y de investigación: se incluyen bibliotecas, hemerotecas, laboratorios, galerías, museos y demás. Se generan informes de visitas, usos, permanencias, horarios, solicitudes, adeudos, pendientes y trámites;
4. Servicio Social Universitario y/o Profesional: situaciones en la prestación, tiempos y entregas, etapa del procedimiento donde se encuentra el estudiante (inscripción y liberación);
5. Prácticas profesionales, estadías o su equivalente: situaciones en el ejercicio de la práctica, tiempos y entregas, etapa del procedimiento donde se encuentra el estudiante;
6. Comisiones, áreas o departamentos académicos de titulación: etapa del procedimiento de titulación, asistencia a asesorías, fecha de examen de titulación.
Como se puede notar, la tutoría es más que buena voluntad y requiere el análisis de gran cantidad de información, sin embargo, para ello, toda la institución debe estar coordinada y articulada.
*Profesor–investigador de la Universidad Pedagógica Nacional Unidad 113 de León, Gto. cespadas1812@gmail.com
En el IEMS de la Ciudad de México, Instituto de Educación Media Superior, un sistema con más de 20 preparatorias, existe un sistema de tutorías, de una hora y media por semana, el docente es tutor de varios estudiantes, además existe otro servicio de Asesoría Académica para los estudiantes, ambos servicios, además de la docencia proporcionan un apoyo invaluable a los estudiantes y contribuyen a proporcionar una educación de calidad y para disminuir el abandono y el rezago escolar