Saludo al Congreso Constituyente de la Asamblea Magisterial Democrática Jalisciense

Miguel Ángel Pérez Reynoso*

Hoy en día el movimiento magisterial es una de las pocas instancias que resiste ante la agresiva oleada del neoliberalismo y la persecución de gobiernos corruptos y despilfarradores en contra de los maestros y maestras movilizados. Surgido en el año de 1980 en nuestro estado, el Movimiento Magisterial Jalisciense (MMJ), (así le llamaré arbitrariamente ya que a lo largo de la historia ha tenido varios nombres), ha protagonizado en estos 37 años distintas experiencias y etapas de lucha, muchos compañeros y compañeras se han sumado al movimiento y otros más se han ido.
Resistir el movimiento es ser congruente con los principios democráticos fundamentales a partir de una ideología libertaria y emancipadora (como le llamaba Paulo Freire). Hoy en esta nueva etapa de lucha se trata de institucionalizar el movimiento, a partir de crear un espacio formal en donde quepan todas las voces y todas las propuestas y en donde también la razón colectiva esté por encima de las razones individuales.
Hoy la historia nos da una nueva oportunidad de coincidir en la acción a partir de la vocación democrática de maestros y maestras de avanzada que se movilizan en cada escuela y en cada rincón de nuestro estado. La vocación democrática de los maestros y maestras democráticos se asume en los hechos tanto dentro como fuera de las aulas de clase, se es democrático en cualquier lugar y de tiempo competo.
Este congreso al que fraternalmente saludo con profundo respeto, podría pronunciarse en cubrir tres grandes puntos a modo de ejes de trabajo:

1. Sumar fuerzas a partir de distinguir a los amigos de los enemigos del movimiento. Hoy en día, cuando el SNTE institucional vive su más profunda crisis no se trata de disputar un poder podrido y caduco; sino de construir una alternativa diferente desde abajo y entre todos y todas.
2. Ser más creativos e imaginativos en los métodos de lucha, las marchas, plantones y movilizaciones han servido a lo largo de la historia, hoy es posible dar lugar a los grupos y colectivos utilizando las llamadas redes sociales. Emprender acciones de sorpresa y golpes certeros en puntos estratégicos que tengan impacto mediático.
3. Actualizar el pliego de exigencias para incluir demandas sociales de justicia educativa en donde diversos grupos magisteriales, se involucren en la lucha de toda la sociedad.

El MMJ debe mirar bajo una perspectiva de ofensiva a partir de conformar una propuesta global de acción en lo sindical, lo profesional y lo social; los maestros y las maestras democráticos somos (tal como fue desde el origen) el destacamento de vanguardia para garantizar el cambio social económico y político que requiere nuestro país.
Con educación la revolución llega más pronto y un pueblo educado es un pueblo liberado. No más luchas aisladas ni defensivas, por un movimiento magisterial plural e incluyente en Jalisco.
Desde este espacio saludo fraternal y respetuosamente la conformación del Congreso Constituyente del Magisterio Democrático de Jalisco.
Éxito en los trabajos y que salga la propuesta que el magisterio de Jalisco necesita.

*Doctor en educación. Profesor–investigador de la Unidad 141 de la UPN campus Guadalajara. mipreynoso@yahoo.com.mx