Lo que queda del sexenio en educación o recomponer el camino en la SEP

Jaime Navarro Saras*

Quedan 27 meses y medio para que culmine el actual gobierno, en tanto, a Leticia Ramírez Amaya, quien fue nombrada secretaria de la SEP el día de ayer, es el tiempo que le queda para recomponer el camino, corregir el rumbo y/o, por lo menos, resolver los pendientes que dejó Delfina Gómez Álvarez durante los dieciocho meses que duró su gestión.
Sabemos que Leticia Ramírez es profesora de educación primaria egresada de la Benemérita Escuela Nacional de Maestros, además de tener estudios truncos en Antropología Social, que fue docente durante 12 años y líder sindical tanto del SNTE como de la CNTE, que viene colaborando con Andrés Manuel López Obrador desde 2000 y es, a decir del propio presidente gente de absoluta confianza, preparada y honesta. Hasta antes de su designación como secretaria fungió como responsable de Atención Ciudadana de la presidencia en tanto, desde que dejó la docencia y sus labores sindicales no ha tenido actividades en los ámbitos educativos.
Por los hechos, sabemos que la SEP no ha sido prioridad para este gobierno, toda vez que con esta nueva secretaria se empata el récord de tres secretarios en una gestión gubernamental, los cuales tuvieron los gobiernos de Emilio Portes Gil, Lázaro Cárdenas, Manuel Ávila Camacho, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, quedando lejos de los gobiernos de Carlos Salinas y Pascual Ortiz Rubio con cuatro y qué decir de Victoriano Huerta con cinco.
Muchos cambios en una Secretaría de gobierno son sinónimo de improvisación, sobretodo porque los dirigentes llegan con equipo y cuando se van cargan con ellos, eso es complejo porque son los encargados de manejar las agendas, las temáticas y el presupuesto, en tanto y de acuerdo a su estilo gastan o niegan presupuesto a x o actividades, programas y aspectos de acuerdo a los intereses que marca el gobierno en turno.
Delfina tiene múltiples aspectos cuestionables, por los hechos, se da a entender que la SEP se manejó sola y dio los resultados que tenía que dar gracias a las políticas de ahorros, austeridad republicana y la eliminación de programas, en tanto, seguramente la nueva gestión emulará lo que dejó la antecesora a menos, claro, que se le permita acceder a más recursos para hacer lo que se dejó de hacer.
Hace muchos años que el magisterio dejó las especulaciones esperanzadoras de lado cuando llegaba un nuevo titular a la SEP, principalmente porque (en el sentir de los maestros) una nueva gestión poco mejora de su situación profesional, en los últimos 40 años así han sido las cosas, de pronto surgen cosas positivas para el mejoramiento salarial y profesional y de pronto desaparecen, como fue, por ejemplo, con el Programa de Carrera Magisterial, que, aunque este programa no estaba muy generalizado, pero al menos era una esperanza para los maestros ingresar o promoverse, lo cual se reflejaba de manera significativa en su salario.
Veamos pues que tanto logra realizar en la SEP la maestra Leticia y si logra terminar el sexenio como secretaria, ya que, una de sus especialidades es impulsar y promover programas de gobierno y, una vez llegando el proceso de la transición gubernamental (a finales de 2023) de seguro se pensará en ella para que apoye al candidato que su partido elija y pueda contender por la presidencia de México en sustitución de López Obrador.
Desde su papel como secretaria no será ajena a los cambios de dirigentes en el SNTE a nivel estatal y nacional, es probable que con su llegada se puedan perfilar dirigencias con nuevos perfiles y a modo, ya que, para bien o para mal, entiende perfectamente los lenguajes y las prácticas del SNTE como de la CNTE y eso, se quiera o no reconocer, no es tarea menor para el actual gobierno.
Esperemos pues como pinta (con la llegada de Leticia Ramírez) el panorama con la SEP, la realidad magisterial y la vida de las escuelas. Veintisiete meses no es mucho pero tampoco es poco si realmente hay proyectos para inyectarle a la educación cosas que la mejoren y que con cada iniciativa le puedan facilitar las cosas a los maestros para que ellos, a su vez, desarrollen aprendizajes en sus alumnos y dinamicen las aulas en estos tiempos complejos de la pospandemia.
Llama poderosamente la atención al hecho de que la designación de Leticia Ramírez no ocupó los encabezados de la prensa y los noticieros, a lo sumo se le dedicaron unas cuantas líneas y eso dice mucho del manejo de imagen (al igual del que tuvo Delfina Gómez), una de las pruebas es que en el noticiero estelar de Televisa que dirige Denisse Maerker, tan sólo le dedicó 8 segundos y en una nota suelta casi al final del programa; así será entonces la política de comunicación social que tendrá la SEP y todo apunta de que las actividades se notificarán por boletines y redes sociales, en tanto, la gestión de la nueva secretaria será presa de las editoriales y la crítica periodística, la cual, para empezar su historia en la educación pública, no son del todo positivas.

*Editor de la Revista Educ@rnos. jaimenavs@hotmail.com