Habilidades digitales y comunicación en redes

Rubén Zatarain Mendoza*

Los entornos digitales en los que deviene la comunicación humana se han diversificado de manera muy rápida y han transformado muchas áreas de convivencia de la sociedad y la familia.
El trabajo formativo de las escuelas y los hogares comparte su tarea con sistemas mediáticos con mucho poder que cosifican y vulgarizan muchas estructuras de cognición importantes.
Apenas conocemos parcialmente e identificamos algunos observables del comportamiento individual y social, de las consecuencias del uso masivo de los medios digitales.
Más allá de que en el país no es barato el acceso a los medios y las redes, lo que genera un círculo económico desfavorable al usuario; ya que, a través de ellos se cuelan pseudo valores que alienan a las masas de niños y jóvenes.
El uso extensivo de los medios impacta las áreas afectivo emocionales y las áreas de desarrollo psicomotor saludables.
El conjunto de sensaciones y percepciones del mundo social y natural también abre un vasto espacio de desarrollo proximal pero también pone lentes a veces generadores de miopía sobre la realidad, genera autismo intelectual.
El tema de la veracidad de lo que se publica, incluyendo medios y mercancías en venta, relaciones de pareja light, son otros temas a reflexionar.
Niños, niñas, adolescentes y jóvenes son usuarios casi de manera generalizada de estos medios y estas formas. Hay contracción de los estadios de edad en materia de acceso a la información. Paquetes de información para un usuario sin rostro, sin edad y sin extracción socioeconómica.
Las generaciones nuevas diversifican las formas de acercamiento a la cultura y sus maneras de socialización.
Los niños y los jóvenes se convierten en población destino y objeto del mercado de los aparatos y de las aplicaciones.
La innovación es imparable y se alimenta del combustible del dinero proveniente de los cada vez más insaciables consumidores.
Las innovaciones tecnológicas no siempre se traducen en calidad de vida y calidad de pensamiento. Muy escasas veces abonan a la construcción de la colectividad.
La vida familiar, la vida escolar, el uso del tiempo se han reestructurado, la circulación de información y la disposición de bienes culturales se ha diversificado.
En este marco se impone repensar la función del estudiante, se impone reflexionar de que manera se incuban sus intereses y se potencia o contamina su actividad intelectual.
La comunicación humana deviene en cantidad y calidad en los entornos digitales, los oídos, los ojos y las inteligencias se colonizan de muchas formas.
La innovación y los medios digitales irrumpen en los espacios escolares y rompen el perímetro físico de sus bardas.
Nunca más la inteligencia de las generaciones jóvenes estará cautiva del discurso de autoridad de un profesor cuyo único recurso didáctico sea la exposición verbal.
Desde la dimensión pedagógica los educadores requerimos formación en materia de medios digitales. Entender sus lenguajes ricos en color, imagen y movimiento. Transitar para acortar la brecha generacional que nos divide de los educandos.
Aprehender los medios en su estructura para enriquecer la interacción didáctica.
Desde los mass media y ahora con los medios digitales hay ya un imperativo de repensar la función docente, hay un enorme potencial para diversificar las formas de capacitación y de actualización.
Comprender las nuevas generaciones y sus ricas interacciones y mediaciones con las que acceden a la información es por sí mismo un reto psicopedagógico.
Comprender sus centros de interés hoy que las tentaciones y deformaciones están a un botón de encendido del celular o de la tablet y a dos pulgares de navegar por las extensas redes sociales donde se habla y gesticula el canto de las sirenas.
En los entornos familiares los padres requieren gobernar el uso de estos medios y reposicionar el encuentro humano.
La comunicación, la relación humana y la formación como centros nutricionales no tangibles en la mesa donde concurren padres e hijos.
Se impone también repensar la función del padre de familia hoy que también son cautivos del canto y la imagen de las pantallas.
Administrar los tiempos, supervisar los consumos culturales, generar los hábitos sanos para la recuperación del cansancio mental y de los sentidos.
Las redes sociales, los medios digitales tienen muchas ventajas, pero, por otro lado, algunas desventajas. A guisa de ejemplo sólo cinco apuntes:

1. Tiempo de lectura. La forma tradicional que implica la posesión de un libro como objeto de lectura como forma de acceso al saber ha caído en estancamiento. Hay la percepción colectiva que la era del libro vive una crisis de uso. Las pantallas roban el tiempo de lectura, roban un valioso tiempo y potencial de aprendizaje. Tal vez es el momento de articular acciones hogar-escuela para llegar a acuerdos en la base de corresponsabilidad y discriminación del saber necesario e imperecedero y la información fugaz e inmediatista en las que devienen la expectativa del infantil y joven consumidor. Tal vez sea el momento de armonizar el uso del libro digital y el libro impreso.
2. Tiempo de juego. En la formación infantil el juego es medio imprescindible para fortalecer el desarrollo armónico y el aprendizaje de reglas. El juego como medio de socialización es un tema muy documentado, los medios digitales pueden constituirse en auténticos ladrones del tiempo de juego.
3. Los niños y los jóvenes en tanto no tengan formación cuidada de sus percepciones es difícil que discriminen eficazmente la calidad de la información. La democratización del acceso a la información está lejos de ser universal pero el consumo de información a través de los medios digitales está cada vez más generalizado sobre todo en los medios urbanos. En la escuela y en el hogar se impone formar al usuario crítico de las redes sociales.
4. Confusión entre información y aprendizaje. Por supuesto que el desarrollo de las estructuras cognitivas es prerrequisito para la asimilación de la información nueva. No por estar informado el alumno tiene aprendizajes reales y como dice el planteamiento de la Nueva Escuela Mexicana aprendizajes profundos y duraderos.
5. Importación de valores no propios de la cultura mexicana. La formación de la identidad y los valores nacionales, así como el aprendizaje de la cultura cívica y educación moral es un proceso gradual que ante la emergencia de mensajes y la globalización sobre todo en materia de música, cine y moda impactan los sentimientos del niño y del adolescente. El comienzo de la era de dominación de los medios digitales ya comenzó desde hace algunos años y la tiranía de los mismos es visible en entornos como el hogar, la escuela y en espacios públicos de la calle y el transporte.

Ya lo afirmaba Platón en el libro VI de la República referido al ámbito político de Atenas pero extensiva su cita ahora que compartimos una aldea global gracias a la comunicación satelital, “Cuando los padres se habitúan a dejar hacer a los niños(…), cuando los maestros tiemblan frente a sus alumnos y prefieren halagarlos, cuando los jóvenes desprecian la ley porque no reconocen nada más allá de ellos mismos, entonces es el comienzo de la tiranía”.
Los niños y los jóvenes requieren de una educación de calidad que les de una mejor oportunidad de emanciparse de la tiranía de medios digitales y redes sociales.

*Doctor en educación. Supervisor de Educación Secundaria del sistema federalizado. zatarainr@hotmail.com