#Día Mundial del Libro y el ensayo sobre la ceguera

 en Graciela Soto

Graciela Soto Martínez*

“Creo que no nos quedamos ciegos, estamos ciegos,
ciegos que ven, ciegos que viendo, no ven”.
José Saramago

Leer para ampliar la visión, para curar la ceguera, iluminar los caminos, lograr las utopías, acabar con la guerra, entender a los hermanos-humanos, aprender a vivir y sobrevivir. Leer en libro impreso, digital, en plataforma, red social, sitio web, la forma puede modificarse, pero la esencia permanece.
El 23 de abril, Día Mundial del Libro, la fecha en que se celebra a este multifacético amigo “el libro” es la misma en la cual Miguel de Cervantes de Saavedra y William Shakespeare dejan lo terrenal, Cervantes, principal escritor de la lengua castellana que nos ha regalado al Gran Quijote de la Mancha y Shakespeare considerado el más importante de la lengua inglesa cuya obra revela la naturaleza de las pasiones humanas.
La Feria Internacional del Libro de Guadalajara celebra el día realizando una lectura pública en voz alta de una obra de José Saramago, “Ensayo sobre la Ceguera”, la cual se va a realizar a un costado de la presidencia municipal de Guadalajara por Paseo Alcalde, de las 10:00 a las 17:00 hrs. Para la participación se requiere registro previo bit.ly/3JVo410. La actividad es organizada por la Universidad de Guadalajara, el Ayuntamiento de Guadalajara, la UNESCO y Penguin Libros México. Esta actividad es parte de las que se van a realizar en el marco del Programa Guadalajara Capital Mundial del Libro. Loables iniciativas que no se han vinculado con otros sectores en educación.
José Saramago, Premio Nobel de literatura de 1998 aborda de forma magistral y simbólica este tipo de ceguera, la cual es viral y cambia las formas de vivir y de convivir. La ceguera no es la típica donde se ve negro, es la que ve todo blanco, tal vez como bruma mañanera en día de humedad o bien nubes espesas atravesando turbulencia, la voz narrativa nos cuenta de la propagación de un virus que afecta la vista, el ojo humano es vulnerable y, sin previo aviso, una persona se queda ciega, fue en el cruce de una calle, ya no pudo conducir su auto, a partir de ahí va a necesitar ayuda para su movilidad. El médico los examina, pero no encuentra la causa de la pérdida de la visión.
El día siguiente llega con la noticia de que este virus ha contagiado al que se ha llevado el auto, así también a otros pacientes de la sala de espera, acuden con el especialista que observa alarmado el fenómeno, ese día teme el contagio, lo cual sucede muy pronto, incluso sueña que se ha quedado ciego. Será su esposa la que le asista y le apoye en todo el proceso. La forma de tratar el problema es el confinamiento, afueras de la ciudad, evitando el contacto social. El lugar, un manicomio abandonado. Después de este spoiler o breve anticipo de lo que encontrarán en la obra la invitación es a leer, lo que a cada quien le agrade. Algo que ya sabemos es cómo los libros cobran vida cuando alguien los lee.
Ya lo dice un dicho popular “no hay peor ciego que el que no quiere ver” o “la paja en el ojo ajeno” lo cual ilustra que las cosas pueden ser evidentes, pero si no hay voluntad o educación de la percepción pasan inadvertidas. Es el conocimiento o la reflexión las que permiten un saber más profundo o una correcta visión de la realidad.
En política se manifiesta pérdida de la vista, por ejemplo, en el nombramiento de funcionarios, los méritos se obtuvieron en campaña, el premio es un cargo, en educación sucede a menudo, Secretarios de Educación o planeadores que llegan con experiencias válidas en otro campo, sin embargo, les falta formación, academia, conocer las escuelas y los alumnos entre otras cosas, su propósito es continuar en el ámbito gubernamental, no el cambio, la mejora o la transformación. Es como un daltonismo, los colores de los partidos afectan las designaciones de quienes dirigen a los demás.
Actualmente se desarrolla una catarata o enfermedad de la vista que no permite ver la dimensión del rezago escolar acumulado por la pandemia y las malas prácticas, niños y jóvenes perdiendo habilidades y conocimientos que van a necesitar en un futuro, con seudo evaluaciones que señalan que se deje transitar a los alumnos en los grados y asignaturas con deficiencias estructurales.
La miopía no permite darse cuenta de la ausencia de programas compensatorios para ayudar a que los alumnos superen la brecha generada. Se deja a la escuela o a las comunidades de aprendizaje las iniciativas, no existen políticas educativas claras y con recursos enfocados en este problema. La educación secundaria da muestra de ello, jóvenes expulsados de la escuela a temprana edad con pocas oportunidades laborales. No hay capacidad de retención de estos alumnos, la problemática aparte de escolar es social, los alumnos se van de la escuela para no volver jamás.
Astigmatismo que dificulta ver el esplendor de la naturaleza a todas las horas del día, no solo para percibir la belleza de un atardecer o la inmensidad del mar, está distorsión de la visión impide actuar ante hechos que la pervierten y la dañan, como los incendios que ya se encuentran con cerros humeantes, fuego devorador de vida que en tiempos de estiaje y calor se propaga ayudado por los vientos y la sequía. Después estos lugares quemados se fraccionan y la tierra es mercancía.
Visión periférica o de rebaño es cuando a la lectura que abre mundos, le aplican la guillotina de la censura, es utilizada para excluir o sancionar, es el caso de los escritores de un país en guerra en particular, que contradictorio leer este texto “Ensayo sobre la ceguera” y a la vez sumarse a las ferias internacionales que están prohibiendo la obra y presencia de los escritores rusos, culpabilizando a una persona por su nacionalidad, decisiones de sus gobiernos, esto es un retroceso, es una ceguera social de gran magnitud, es oportuna la frase “ciegos que guían a otros ciegos”. Tal vez este sea el tiempo propicio para desafiar la censura y leer la Tolstoi, a Dostoyevsky, Antón Chejov, Boris Pasternak, Svetlana Aleksándrovna Aleksiévich, Maximo Gorki, Nikolái Gógol, Mijail Bulgakov, el último de nacionalidad rusa cuando todavía pertenecía a Ucrania. Un escritor nace en algún sitio en particular, después la obra es de carácter universal.
El Día Mundial del Libro es el 23 de abril, sin embargo, los lectores somos de todos los días, si acaso se hacen pausas, que ayudan a elegir o retomar lecturas pendientes, lo que si urge es motivar a los y las analfabetas funcionales que sabiendo leer no leen y que leyendo no entienden. Viva el libro y la lectura que nos ha dado más vidas de las que podemos vivir.

*Doctora en Educación. Jefa de Sector de Educación Preescolar en la SEJ. grace-soto@supervisores.sej.gob.mx

Escriba su búsqueda y presione ENTER para buscar