Cómo usar los mapas en clase de Historia

Carlos Arturo Espadas Interián*

En su diversidad, los mapas resultan un recurso didáctico ilustrativo que permite realizar actividades ligadas a los contenidos de la materia de Historia. Lo primero será escoger el tipo de mapa que responda a los contenidos, aprendizajes esperados y competencias previstas.
Una vez definido el contenido o contenidos, aprendizajes esperados y la o las competencias, se procede a determinar el tipo de mapa que responde a las necesidades tanto del curso como de los estudiantes. Así se puede dibujar un mapa de los Estados Unidos Mexicanos en el patio de la escuela (donde aún no exista) para que los niños caminen por el contorno y con ello tengan una idea de la forma que tiene nuestro país, con ello se trabaja motricidad gruesa, aprendizaje kinestésico, geografía y muchos otros aspectos más. Este ejercicio se puede realizar con niños pequeños –aunque no exclusivamente-.
Para elegir se tienen mapamundis, planisferios, región continental(es), continente, subcontinente, región, estado, municipio, ciudad, colonia. La variedad es impresionante no únicamente en el tipo de mapa, sino también la impresión, colores, rútulos, texturas y demás.
Se puede buscar un mapa de la escuela en algún medio electrónico o digital y en éste, los niños pueden identificar distintas áreas: salones, patio escolar y demás. Con ello pueden iniciarse en la interpretación y “lectura” de los mapas: escalas, relieves, símbolos… También puede servir para trazar coordenadas e indicar rutas de traslados o flujos.
En los mapas se pueden representar batallas, cambios en la configuración de ciudades, áreas de influencia de civilizaciones, zonas comerciales, vínculos políticos, alianzas y todo lo que podamos considerar en nuestra materia desde los distintos grados y niveles escolares.
Por ejemplo, los mapas de Europa, para el tema relacionado con la Segunda Guerra Mundial, resultan fundamentales. Tanto para ver la variación de fronteras, explicar las causas y ver el avance o retroceso de tropas, analizar a la par de ello los impactos en la población y las naciones, las alianzas y ver cómo se configura el continente a partir de las distintas acciones que tuvieron lugar.
Puede verse un mapa con una región específica, por ejemplo, para dibujar la Línea Maginot y entender las causas que impidieron, en la Segunda Guerra Mundial, su funcionalidad defensiva. Se pueden usar algunos modelos a escala para simbolizar las tropas y los avances. Explorar el significado de la Línea Moginot para Francia y el posible impacto que vivió la población a partir de haber vivido su inutilidad defensiva.
Se puede usar otro para dibujar el muro de Berlín a la par de explorar su historia, implicaciones políticas, sociales, culturales, ideológicas, estrategias defensivas; causas que explican su construcción, causas y consecuencias de su caída… Entre otros elementos de análisis.
Se pueden usar modelos a escala que representen ciudadanos, tropas, cargamentos de distinta índole, estilos arquitectónicos y todo lo que requieran las clases para las cuales o para la cual se haya pensado el uso del mapa.

*Profesor–investigador de la Universidad Pedagógica Nacional Unidad 113 de León, Gto. cespadas1812@gmail.com